La Ertzaintza ha gestionado desde febrero de 2021 un total de 489 denuncias de hurtos leves en comercios siguiendo el protocolo de gestión "in situ" que permite denunciar en el propio establecimiento a personas identificadas en el momento de cometer el delito leve con el objeto de celebrar el juicio rápido.
Los datos han sido presentados en la ponencia marco que ha presentado en el 24 Congreso de Prevención de hurtos y fraudes organizado por la Asociación Española de Codificación Comercial que ha reunido en Madrid a diversos cuerpos policiales, directores y responsables de seguridad de empresas, ha informado el Departamento de Seguridad.
El comisario jefe de la comisaría de la Ertzaintza en Durango, Iñaki Gorrotxategi, y el oficial de la Secretaría Técnica de Investigación de la Jefatura Territorial de Bizkaia, José Pinto, presentaron los primeros resultados del procedimiento cuyo uso alcanza a un total 432 establecimientos vascos, entre ellos grandes centros y superficies comerciales.
El procedimiento se aplica a casos de delitos leves de hurto, cuando el autor del mismo está retenido en el establecimiento por un vigilante de seguridad o por los empleados. El sistema permite realizar la denuncia en el ordenador del establecimiento y se cita a las partes en el mismo momento.
Así evita que las empresas tengan que desplazarse a dependencias policiales a denunciar, potencia la tramitación de denuncias por juicio rápido y posibilita que se puedan solicitar en el juicio medidas de alejamiento, debido a que el hurto leve es un delito de alta multi-reincidencia.
La coordinación ha demostrado una "alta efectividad" en cuanto a la celebración de juicios rápidos, que asciende al 78 % de los casos denunciados, con un 97 % de sentencias condenatorias. Entre febrero y octubre de 2021, la Ertzaintza ha tramitado cerca de 2000 atestados, de los cuales 489 han sido gestionados por este procedimiento.
El protocolo de denuncia "in situ" despertó el interés de varias empresas, varias de ellas multinacionales, por incorporar esta herramienta de seguridad, señala el Gobierno vasco.