Madrid - Cada vez son más los municipios del Estado que intentan subirse al carro de la I+D+i y ya son 7 vascos, del total de 62 en todo el país, los que a día de hoy tienen el sello Ciudad de la ciencia y la innovación. En Euskadi cuentan con esta distinción Etxebarri, Abanto Zierbena, Bilbao, Barakaldo y Ermua, en Bizkaia; y los guipuzcoanos de Eibar y Donostia.

En todo el Estado los hay grandes como Madrid, pero también pequeños, como Gotarrendura (Ávila), con menos de 200 vecinos y volcado en energías renovables. Esta distinción nació en 2010 y la concede el Ministerio de Economía y Competitividad a aquellas localidades que realicen un esfuerzo para potenciar el conocimiento y las infraestructuras innovadoras tanto científicas como tecnológicas y sociales.

El galardón no incluye una dotación económica pero las ciudades distinguidas entran a formar parte de la Red Innpulso, una asociación creada para potenciar la I+D+i y que sirve de foro de contacto permanente para compartir recursos e información, una interacción fundamental sobre todo para las más pequeñas.

El sello se concede en tres categorías: ayuntamientos de hasta 20.000 habitantes, de entre 20.000 y 100.000 y con una población mayor de 100.000, explica Diana Alonso, consejera técnica de la Subdirección General de Fomento de la Innovación, quien recalca que el tamaño del pueblo no es una limitación para la elección.

Por comunidades, Aragón, Nafarroa y La Rioja tienen a uno de sus municipios distinguidos; en Castilla-La Mancha, Cantabria y Murcia hay dos; Galicia cuenta con tres, al igual que Andalucía, Asturias, Extremadura y Canarias; la Comunidad de Madrid tiene cuatro; hay siete en Euskadi y Castilla-León; nueve en Catalunya; y la Comunidad Valenciana, con once, es la que más sellos acumula.

Ciudadanía y empresas Para conseguir este sello, los candidatos deben acreditar su capacidad de innovación en tres bloques: hacia la ciudadanía (con la prestación de servicios públicos innovadores), hacia sus empresas y el tejido empresarial de su territorio y la innovación interna. Renovar las propias estructuras organizativas internas de sus municipios es un factor clave a la hora de desarrollar procesos innovadores, apunta Diana Alonso, y tener a una persona o equipo destinado a temas de innovación marca “muchas veces la diferencia”.

En la última convocatoria se presentaron once candidaturas. Fueron nueve las que lo consiguieron: Alcalá de Guadaíra (Sevilla), Alcázar de San Juan (Ciudad Real), Almussafes, Gandía y Torrent (las tres en Valencia), Alfaz del Pi (Alicante), Aranda de Duero (Burgos), Camargo (Cantabria) y Villamayor (Salamanca). - C.Fernández