Donostia. Un donostiarra de 20 años falleció ayer tras ser alcanzado por una piedra de grandes dimensiones que cayó de la ladera del monte Urgull mientras caminaba por el Paseo Nuevo. El joven recibió un fuerte impacto en la cabeza que le hizo perder una gran cantidad de sangre y los sanitarios desplazados hasta el lugar no pudieron hacer nada por salvar su vida.
El trágico suceso tuvo lugar hacia las 17.10 horas, cuando Mikel Arzak Giménez caminaba por el bidegorri del Paseo Nuevo, a la altura de la Sociedad Fotográfica de Gipuzkoa, junto a dos amigos, que resultaron ilesos. Según informó el Ayuntamiento mediante una nota de prensa, "un grupo de cuatro piedras" de gran tamaño se desprendieron de lo alto de la ladera del monte Urgull. Una de ellas cayó "de canto" y atravesó rodando la calzada hasta golpear con una de las rocas decorativas que separan el bidegorri de la calzada. Esta colisión le hizo "elevarse" y "golpear al joven que paseaba por la zona más cercana al mar".
Testigos del suceso alertaron a los servicios de emergencia, que desplazaron hasta el lugar dos ambulancias de Osakidetza y una de la DYA. Los facultativos encontraron al joven en parada cardiorrespiratoria e intentaron reanimarle durante 45 minutos sin éxito. Según informaron fuentes de la DYA, el donostiarra perdió una gran cantidad de sangre como consecuencia del impacto, lo que provocó su muerte. El levantamiento del cadáver se produjo hacia las 19.00 horas.
El fallecido es Mikel Arzak Giménez, de 20 años de edad y residente en la capital guipuzcoana. El joven cursó sus estudios en la ikastola Ekintza hasta el año 2011, donde le recuerdan como "un alumno brillante" y "un crack de los ordenadores". En la actualidad estudiaba Ciencias de la Computación en la UPV/EHU.
En obras La zona en la que se produjo el desprendimiento es un espacio contiguo al lugar del que el pasado mes de noviembre cayó una roca de tales dimensiones que ocupaba un carril de la circulación. Precisamente el Consistorio está realizando trabajos para afianzar la ladera en este punto, con el fin de evitar nuevos desprendimientos en el futuro. El espacio contiguo a la ladera se encuentra acotado por unas vallas para proteger la zona de obras, aunque el resto del paseo permanecía abierto al tránsito.
El Ayuntamiento de Donostia lamentó "profundamente este desgraciado hecho" y puso en marcha una investigación para determinar las causas del siniestro. Asimismo, el Servicio Municipal de Urgencias Sociales activó el protocolo previsto en estos casos con el objetivo de ayudar a la familia del chico, tal y como informó el Consistorio.
Hasta el lugar del suceso se desplazó el concejal de Desarrollo Económico, Josu Ruiz, quien sustituye en sus funciones al alcalde de la ciudad, Juan Karlos Izagirre, de viaje oficial en Hiroshima (Japón) para participar en el octavo Congreso General de la asociación Alcaldes por la Paz (Mayors for Peace). El Gobierno local convocó para hoy una junta de portavoces de urgencia en la que se abordará el asunto con los grupos de la oposición.
A última hora de la tarde de ayer los operarios trabajaban para retirar los pedruscos y despejar la zona lo antes posible. El Paseo Nuevo, mientras tanto, permanece cerrado al tráfico de vehículos y peatones.
