Berlín. El secretario de Estado para la Unión Europea (UE), Diego López Garrido sostuvo ayer que hasta donde él sabía el Estado no ha hecho ningún tipo de preparativos respecto a la posibilidad de una demanda por daños y prejuicios contra Alemania. "Nunca escuché que el Gobierno español estuviera preparando una demanda de Estado contra Estado", dijo. No obstante, López Garrido no quiso descartar posibles demandas de instituciones privadas por daños y prejuicios contra la ciudad-estado de Hamburgo que probablemente se harían ante tribunales alemanes.

Sobre si su tono no podía ser interpretado como "conciliador" tras las irritaciones de las últimas semanas, López Garrido respondió que él no emplearía ese término indicó que hay que ser "constructivos".

"Los errores que se han cometido se han cometido y los seguiremos señalando. Pero tenemos que ser constructivos, tenemos que trabajar juntos", añadió. "España se une a Alemania en los esfuerzos por encontrar una solución al problema sanitario. Ese es el principal problema. Se trata de una enfermedad grave que ha producido muertes", dijo el secretario de Estado.

En este sentido, las víctimas mortales por la letal bacteria aumentó ayer a 29, tras producirse ayer otros tres fallecimientos, dos de ellos en Baja Sajonia (norte) y otro en Hesse (centro-oeste).

López Garrido insistió en que se había producido un error en el manejo de la crisis por parte del gobierno regional de la ciudad-estado de Hamburgo, pero que ahora había que mirar hacia adelante.

"Respetamos que las autoridades sanitarias hagan recomendaciones de higiene, pero lo que no se puede hacer es acusar a un producto concreto de un país concreto de ser el origen de una enfermedad sin pruebas científicas y objetivas", dijo López Garrido al indicársele que la recomendación de no comer pepinos, lechugas y tomates seguía vigente en Alemania.