Síguenos en redes sociales:

Una cirugía robótica pionera extrae un tumor a un paciente sin intubar y con una única incisión

La cirugía se ha llevado a cabo en el hospital Ruber Internacional de Madrid y ha estado liderada por el doctor Diego González Rivas

Una cirugía robótica pionera extrae un tumor a un paciente sin intubar y con una única incisión@dgonzalezrivas

La primera cirugía robótica del mundo para la extracción de un tumor agresivo al final de la tráquea con un único orificio y con el paciente sin intubar se ha realizado esta semana en el madrileño hospital Ruber Internacional a un paciente venezolano que viajó a España gracias a la Fundación González Rivas, del cirujano torácico Diego González.

En una entrevista con EFE, González Rivas, que ha liderado la cirugía, explica que el tumor se encontraba "en la peor localización posible" en la carina (el final de la tráquea donde se bifurcan los bronquios), pero lo que convierte la operación en pionera en el mundo es que el robot Da Vinci ha utilizado una única incisión (en el tórax de 4 centímetros) y durante el proceso operatorio el paciente ha respirado por sí mismo, sin necesidad de una máquina.

González, que preside esta fundación que tiene por objetivo llevar la cirugía mínimamente invasiva a países en desarrollo, subraya que se trata de una intervención curativa con buenas expectativas.

La intervención en el Ruber tuvo lugar este lunes y se prolongó durante cinco horas y media, con resultado satisfactorio.

Cirugía de riesgo

No obstante, González Rivas admite que, aún saliendo bien, es una cirugía de riesgo ya que puede haber complicaciones posoperatorias.

Se trata de un cáncer escamoso situado en la parte final de la tráquea que, en este caso, invade el bronquio derecho y parte del izquierdo: "Lo que se hace en la intervención es cortar la tráquea y reconstruir la carina sin quitar nada de pulmón".

"Estamos yendo a un sitio donde una complicación da poco margen ya que es el tubo que da la respiración a los pulmones. Tratamos el tronco donde se conectan los pulmones, no quitamos el pulmón pero sí la conexión. Si falla, la complicación es severa".

González Rivas precisa que se trata de un tumor extremadamente raro. Un cirujano torácico puede ver uno o dos así en toda su vida, aunque en el Shanghái Pulmonary Hospital, donde opera habitualmente, llegan más casos al ser centro de referencia.

La operación evita muerte súbita

Lo que valora el equipo médico (tres cirujanos torácicos, dos anestesistas y tres enfermeros) es que sin esta operación, el paciente hubiera fallecido en unos meses por muerte súbita.

Y es que el tamaño del tumor es de dos centímetros, prácticamente iguala el ancho de la tráquea.

Otros dos cirujanos han participado: el venezolano Regulo Ávila, que trabaja desde hace años con González Rivas, y el rumano Mugurel Bosinceanu.

En declaraciones a EFE, Regulo Ávila, cirujano torácico del hospital Ruber Internacional, insiste en la importancia de que la operación se realice a través de un único orificio por donde pasan hasta tres brazos del robot Da Vinci: "Se han hecho operaciones con cinco incisiones, pero jamás con una".

González Rivas, con amplia experiencia, pone en valor a su fundación que no solo opera en países en vías de desarrollo, también empieza a hacerlo en España gracias, en esta ocasión, al Ruber Internacional, que asume el coste médico.

En ocho días se planificó

Pavler Carpio, de 66 años, llegó al hospital Ruber Internacional el 25 de diciembre. Lo hizo en avión, procedente de Venezuela, vía Colombia, por los problemas de cierre del espacio aéreo, con un diagnóstico que conoció hace unos meses tras una tomografía en su país, donde el tumor se consideró inoperable.

Carpio contó con la colaboración de su hija, la ginecóloga venezolana Sol Carpio que, a través de Instagram, contactó con el doctor González Rivas.

"En 24 horas me llamó y en ocho días se planificó la operación", dice satisfecha la hija, inmensamente agradecida a la fundación y al equipo que ha operado a su padre.

La hija de Carpio también pone en valor el libro de González Rivas 'Curando el mundo', donde enseña su técnica mínimamente invasiva para operaciones de pulmón (ha intervenido a más de 7.000 pacientes de 129 países). Ahora da un paso más.