En apenas una semana llega el esperado puente de noviembre, tres días para disfrutar de la cultura. Esa es la propuesta de las comarcas de Uribe, Lea Artibai y Urdaibai que invitan a descubrir espacios cercanos y que guardan una gran historia tras de sí a través de seis visitas guiadas gratuitas.
Para el sábado 30 se han diseñado cuatro iniciativas. La más madrugadora es la que recorre el palacio Artaza en Leioa. En Mungia se abre paso el románico tardío en la ermita de San Miguel de Zumetzaga mientras que en Mundaka dos templos religiosos serán los protagonistas: la iglesia de Santa María y la ermita de Santa Catalina. El cierre a esta jornada lo pondrá el barrio de Barinaga en Markina-Xemein, lugar que se considera la cuna del cooperativismo vasco.
El domingo estará marcado por la visita a la iglesia de San Andrés de Ibarrangelu, conocida como la Capilla Sixtina vasca. Y el cierre será el lunes 1 con la ruta por el jardín Murga en Markina-Xemein. Es imprescindible la cita previa en la web turismourdaibai.com/ms.
La primera línea de playa de Leioa
Palacio Artaza. Este espectacular espacio de Leioa ofrece dos visitas el sábado 30 (a las 11.00 y a las 12.30 horas). Con más de un siglo de historia (se construyó en 1914), el palacio Artaza ocupa una finca de 30 hectáreas. A muchos les sorprenderá que a principios del siglo XX era la primera línea de playa en Leioa. Esta edificación de Manuel María Smith, por encargo del empresario Víctor Chávarri, ha alojado a personajes relevantes como el rey Alfonso XIII.
Templos bañados por el Cantábrico
Ermita Santa Katalina e Iglesia de Santa María. El domingo 31 a las 12.30 horas se propone conocer a ermita de Santa Catalina, considerada una de las más bonitas de la costa. Allí se ahondará en las utilidades que ha tenido: desde lugar de reuniones de la cofradía de pescadores hasta punto de cuarentena para enfermedades o epidemias. Posteriormente, los visitantes se acercarán hasta el mirador del campanario de la iglesia de Santa María de Mundaka, un templo gótico-renacentista en una magnífica localización.
Un paseo por el románico tardío
Ermita de San Miguel de Zumetzaga. El sábado 30, a las 11 de la mañana, se podrá conocer la ermita de San Miguel de Zumetzaga en Mungia, que marca el inicio del monte Jata. Esta construcción es uno de los referentes del románico tardío y destaca en especial por la ventana del ábside. No solo asombra el interior sino que las columnas exteriores son de especial relevancia ya que están decoradas sin simetría, con elementos circulares, con redes de rombos y con cestos de cuerdas.
La cuna del cooperativismo vasco
Barinaga. Si hay un barrio en Markina-Xemein que está ligado al cooperativismo ese es Barinaga. Aquí fue donde nació José María Arizmendiarrieta, fundador del cooperativismo. El sábado 30, desde las 16.00 horas, se podrán conocer todos los elementos de los barrios rurales que se conservan hoy en día: bolera, perratoki, frontón, iglesia... y, además, también se mantiene en pie la vieja escuela rural, que mostrará cómo ha cambiado el sistema educativo con el paso del tiempo.
La Capilla Sixtina del arte vasco
Iglesia de San Andrés. El sábado 30, desde las 12.00 horas, la iglesia de San Andrés de Ibarrangelu mostrará su llamativo interior que le hacen ser conocida como la Capilla Sixtina del arte vasco. Nada más entrar, se puede contemplar el enorme techo de madera que esconde 15 bóvedas estrelladas repletas de dibujos a color. Y si el interior deslumbra, también lo hace su exterior gracias a su bonito pórtico y a una escultura del Sagrado Corazón que se ubica en una gran torre.
La teatralización en el jardín Murga
Jardín Murga. Si hay un rincón de Bizkaia que no ha estado accesible hasta hace poco, este es el jardín Murga de Markina-Xemein, que recientemente abrió el Ayuntamiento de la localidad de Lea Artibai. Y la propuesta del lunes 1, a las 12.00 horas, es una visita teatralizada por este espacio natural donde se ubica la torre Bidarte, que perteneció a Jose Mª de Murga y Mugartegui, que fue viajero, militar y escritor nacido en este municipio. Conocido como el “moro vizcaino”, trajo hasta este jardín especies exóticas que todavía se conservan en la actualidad.