Ander Guevara y Nahuel Tenaglia fueron los primeros albiazules en exponer su sentir de cara a lo que puede ser la nueva temporada para el Glorioso. Dos jugadores cuya ascendencia dentro del vestuario es evidente y que tienen buenas vibraciones a la hora de que el equipo haga una gran campaña.
El centrocampista vitoriano no pudo ser más claro cuando fue cuestionado sobre cómo ve al grupo que se está conformando. “Tenemos un ambiente inmejorable. Estamos intentando ayudar a la gente nueva, es importante hacerles sentir en casa como desde el primer día y que se sientan a gusto. Lo de dentro no hay que tocarlo demasiado, sabemos la fuerza del vestuario y eso va a ser, otro año más, uno de nuestros puntos fuertes”, reconoció.
Guevara elogió a su nuevo compañero en la sala de máquinas como Pablo Ibáñez, quien a su juicio “es un chico excepcional que está demostrando que tiene mucho nivel”. “Desde el primer día ha sabido adaptarse al ambiente tras salirse del club de toda su vida y parece que llevara mucho tiempo aquí”, admitió Guevara.
Lo importante en estas primeras sesiones de trabajo, precisó Guevara, es “acumular carga física y kilómetros en las piernas”. “Ya llegará luego el momento de perfilar un poco más el equipo a nivel táctico. El Chacho intentará dar continuidad a lo que quería hacer el año pasado. Sobre todo que se vuelva a ver un gran Deportivo Alavés”, confió el medio gasteiztarra.
Nahuel, esperanzado
En términos similares se expresó Tenaglia, otra de las voces autorizadas del vestuario. El defensor argentino dejó claro que “arranca una nueva ilusión” para todos a la espera de cómo quede configurada la plantilla.
“Esperamos arrancar con todo, ir partido a partido. Ojalá no suframos tanto como la pasada temporada, estamos entrenando muy duro y con ganas de que lleguen los amistosos. Queremos encontrarnos con las mejores sensaciones para empezar bien”, subrayó.
Tenaglia hizo hincapié en que “cada vez me gusta ser más líder y darlo todo en los entrenos para ser un ejemplo para los chicos nuevos”, se ofreció para actuar tanto de lateral como de central –“estaré para que lo que necesite el equipo, uno siempre quiere estar en el once, pero eso se demuestra en el día a día”, apuntó– y también se refirió a la reciente marcha de Conechny.
“Además de un amigo, nos daba mucho en el día a día pero le tocó irse. Tenía ganas de seguir, aunque también le tiraba volver con la familia y ha tomado una buena decisión”, explicó el albiceleste, quien por último auguró “un Alavés que presione”, ya que “eso nos dio buenos resultados el año pasado”.