El último tramo del pleno de control celebrado esta mañana en el Parlamento Vasco ha tenido un carácter especial ya que ha contado con el protagonismo absoluto de Beatriz Artolazabal en la que ha sido su última intervención en la Cámara como consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales. La semana que viene cesará en su cargo y se centrará en su papel como candidata del PNV a la Alcaldía de Gasteiz, y hoy ha tenido la oportunidad de despedirse de los que han sido sus compañeros en sede parlamentaria durante más de un lustro.

 “Os voy a echar de menos”, ha concluido, emocionada, tras pedir a la presidenta del Parlamento, Bakartxo Tejeria, unos minutos más para una despedida que ha tenido un carácter individualizado con los representantes de los grupos con los que ha compartido debates en los asuntos de su Departamento. Así, por ejemplo a Carmelo Barrio (PP) le ha agradecido “tantas horas dedicadas juntos a la memoria, la convivencia y la cooperación”; de Nerea Kortajarena (EH Bildu) ha destacado que “he podido debatir desde el primero al último día sobre el eficaz sistema vasco de servicios sociales” y sobre Iñigo Martínez (Elkarrekin Podemos-IU) ha señalado que “nos ha unido, casi siempre, la memoria histórica y la cooperación internacional”.

Antes, Artolazabal ha respondido a dos interpelaciones sobre el macrocentro de refugiados que, con 350 plazas, el Ministerio de Seguridad Social pretende ubicar en Gasteiz, precisamente un día después de la publicación en el BOE del concurso de licitación de las obras para acondicionar la antigua clínica Arana de cara a acoger ese espacio. Todo ello pese al rechazo del PNV a este proyecto y a la petición de diálogo de la propia Artolazabal y del alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran, al ministro José Luis Escrivá. La primera ha tenido oportunidad hoy de responder expresando su oposición al modelo de acogida “que ha propuesto el Ministerio, sin información previa ni transparencia”.

Atención cercana e individualizada

En contraposición a esta actuación por la vía rápida, la consejera ha puesto en valor el modelo vasco de acogida, basado en el Pacto Social Vasco por la Migración y que tiene como mascarón de proa “las necesidades de los colectivos más vulnerables y el compromiso solidario de nuestra sociedad con ellos”. Esto se ha traducido en “un trabajo individualizado, cercano y exitoso”, llevado a cabo en colaboración con las instituciones y las entidades sociales y del tercer sector. Como resultado, en los últimos dos años se ha atendido a cerca de 1.400 personas, incluyendo un esfuerzo extra por los refugiados de la guerra en Ucrania.

Cogobernanza significa acuerdos y diálogo”, ha afirmado Beatriz Artolazabal, citando al presidente español, Pedro Sánchez. “No comparto la unilateralidad de hechos consumados a través del BOE”, ha añadido, afeando la actuación del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. El inicio de los permisos para la rehabilitación del inmueble ya supone un serio toque de atención, pero “nos preocupa sobre todo el corazón de estos recursos”, ha apostillado. Y es que, según ella, “la atención a las personas solicitantes de protección internacional requiere de proximidad y atención individualizada”, algo en lo que coinciden las propias entidades sociales, que también han advertido del riesgo de generar guetos en un centro con 350 plazas. La consejera también ha realizado sendas intervenciones sobre la Ley de Igualdad y el sistema vasco de servicios sociales, ambas en respuesta a EH Bildu, tras lo que se ha despedido de forma definitiva de la Cámara.