madrid. La subcomisión que estudia en el Congreso la reforma de la Ley Electoral ha acordado que los españoles residentes en el extranjero no puedan votar en las elecciones locales (ayuntamientos, diputaciones y cabildos) al entender que no existe relación de vecindad. Así lo recogerá el informe que la subcomisión elaborará con los distintos aspectos en los que propone que se modifique la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG). Los emigrantes sí podrán votar, según acordó la subcomisión, en las elecciones al Parlamento (Congreso y Senado), en los comicios autonómicos, en las elecciones europeas y en todos los referendos que convoque el Estado.
La pretensión de la subcomisión es que esta reforma se lleve a cabo antes de las elecciones locales de 2011, lo que impedirá al 1,3 millones de electores del Censo de Residentes Ausentes (CERA) participar en ellas. El presidente de la subcomisión, Alfonso Guerra, destacó que llegar a este acuerdo ha llevado "mucho tiempo", aunque finalmente contó con un respaldo mayoritario y sólo expresó sus reservas Gaspar Llamazares (IU) y Ana Oramas (CC).
Según explicó Guerra, la propia legislación electoral sostiene que los alcaldes y concejales de un municipio son elegidos por sus vecinos, y los miembros de la subcomisión han coincidido en que los españoles emigrantes han perdido, generalmente, esa relación de vecindad con sus lugares de origen. Esto afectará también a los descendientes de exiliados durante la Guerra Civil y el franquismo que, según la Ley de la Memoria Histórica, van a recibir la nacionalidad española, lo que previsiblemente elevará el Censo de Residentes Ausentes de 1,3 a 1,7 millones de personas en los próximos meses.
Otra novedad es la posibilidad de que los emigrantes puedan votar en urna, además de por correo, en los consulados de los países en los que residen.