El Ejército israelí continúa su intensa ofensiva en la Franja de Gaza este lunes, fortaleciendo a sus tropas terrestres ante una inminente incursión en el sur del enclave palestino, donde realiza fuertes bombardeos a pesar de que cientos de miles de civiles se refugian ahí de los combates y la destrucción en el norte.

"Las tropas terrestres de las Fuerzas de Defensa de Israel continúan operando en la Franja de Gaza, al tiempo que la fuerza aérea atacó aproximadamente 200 objetivos terroristas de Hamás", indicó un portavoz del Ejército.

El jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, teniente general Herzi Halevi, aseguró el domingo que sus fuerzas están expandiendo sus operaciones hacia el sur de la Franja, zona donde hasta ahora no habían irrumpido las tropas terrestres y anteriormente calificada como "zona segura" para la evacuación masiva de civiles.

Por su parte, el Ministerio de Salud en Gaza, controlado por Hamás, aseguró que "la ocupación amplió el alcance de sus ataques contra civiles y no dejó ni un centímetro de Gaza sin bombardeos (...) Afirma falsamente la existencia de zonas seguras".

Evacuaciones en el sur

El sábado, Israel ordenó la evacuación de varias zonas de Jan Yunis, en el sur del enclave, argumentando que esa zona ya es una "peligrosa zona de combate", a pesar de que previamente ordenó el desplazamiento de la población del norte de la Franja hacia ese lugar.

La Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas (OCHA) indicó que las fuerzas militares israelíes designaron este domingo un área que equivale al 20 % de toda la localidad de Jan Yunis como de "evacuación inmediata", a pesar de tratarse de una zona donde además de los 117.000 residentes que había cuando empezó la guerra (7 de octubre) hay 21 instalaciones donde se refugian 50.000 desplazados llegados del norte.

La ONU señaló que la orden es que estas decenas de miles de personas ahora se muevan a tres áreas hacia Rafah (frontera con Egipto) "que ya están más que saturadas".

"El alcance del desplazamiento a raíz de esta orden no está claro", reconoce la ONU, cuyo personal sigue trabajando para ayudar a la población víctima de la guerra.

Naciones Unidas recalcó una vez más que Israel -como una de las partes de esta guerra- tiene la obligación por las leyes internacionales de minimizar el daño a los civiles y que cuando les ordena evacuar, debe hacerlo con la anticipación suficiente, ofreciéndoles rutas seguras (garantías de que no serán bombardeadas) y un lugar al que ir, lo que en este caso no sucede.

Más de 300 muertos en un solo día

Los ataques de Israel contra Gaza causaron al menos 316 muertos únicamente este domingo y 664 heridos, según cifras reportadas a Naciones Unidas por la entidad sanitaria de Gaza controlada por el grupo islamista Hamás, mientras que la distribución de ayuda humanitaria se ha vuelto a restringir severamente.

Prácticamente sin ayuda humanitaria

La gobernación de Rafah fue la única en Gaza donde hubo en las últimas horas alguna entrega de ayuda a la población (sobre todo harina y agua), mientras que los suministros de supervivencia hacia el área de Jan Yunis se paralizaron debido al aumento de las hostilidades, de acuerdo al reporte diario de la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas (OCHA).

Asimismo, reportó que el sector medio de la Franja de Gaza -desde el cual Israel decidió cortar en dos el enclave, centrando sus ataques masivos en el norte y ordenando a su población desplazarse al sur- ha quedado "desconectado" del sur tras la prohibición de Israel de cualquier desplazamiento, incluido de ayuda humanitaria.

Esto a la vez ha detenido por completo el limitado acceso que hubo durante la tregua al norte de Gaza, donde siguen viviendo decenas de miles de civiles.

Víctimas

Los ataques por aire tierra y mar del poderoso Ejército de Israel contra la devastada Franja han sucedido sin pausa desde que se inició la guerra el 7 de octubre, excepto por una tregua de siete días que duró del 24 al 30 de noviembre.

Más de 15.520 personas han muerto y 41.316 han resultado heridas en el enclave, el 70% de ellos niños y mujeres. Estas cifras podrían ser mucho mayores tomando en cuenta que hay unos 7.000 desaparecidos, muchos de ellos bajo los escombros.

Además, esta guerra ha dejado 1,8 millones de desplazados en la Franja, el 80 % de la población total, según la agencia humanitaria de la ONU, OCHA.