El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado este viernes poner fin a la Misión Integrada de Asistencia para la Transición de la ONU en Sudán (UNITAMS) a partir del 3 de diciembre en el marco de los enfrentamientos entre el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).

El proyecto de resolución, aprobado con 14 votos --con la abstención de Rusia-- y presentado por Reino Unido tras una solicitud por parte del Gobierno de Sudán ante el organismo, pone como fecha para iniciar el proceso de retirada el 1 de marzo de 2024.

El texto pide así una transición "ordenada" con el objetivo de "garantizar la seguridad del personal de la ONU" y proteger tanto las instalaciones como los activos de la misión, que tendrá que salir del país antes del 29 de febrero de 2024.

El jefe de la misión, Volker Perthes, presentó su dimisión ante el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, en septiembre poco más de tres meses después de que las autoridades sudanesas le declararan 'persona non grata'. El pasado 21 de noviembre Guterres nombró a Ramtane Lamamra como su sucesor.

El jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan, había pedido que Perthes dejase de "interferir en los asuntos internos" del país, amenazándole con la expulsión del territorio del país africano.

La guerra, que estalló el 15 de abril tras fuertes discrepancias entre el Ejército y las RSF sobre la integración del grupo paramilitar en el seno de las Fuerzas Armadas, que hicieron descarrilar el proceso de transición abierto tras el derrocamiento en 2019 de Omar Hasán al Bashir después de 30 años en el poder.

El conflicto ha dejado ya miles de muertos y más de 7,1 millones los desplazados internos en Sudán, lo que convierte al país africano con un mayor número de desplazados internos de todo el planeta, según Naciones Unidas. Las partes han mantenido recientemente conversaciones en Arabia Saudí, si bien no lograron pactar un alto el fuego.