Las multas en la carretera están muy a la orden del día. Con el paso del tiempo, las autoridades han ido detectando nuevas situaciones que ponen en riesgo el estado de los usuarios de la carretera. Por lo tanto, se añaden más multas de tráfico con el objetivo de evitar accidentes y garantizar la seguridad en general.
Por eso mismo, es más importante que nunca saber cuáles son los gestos o acciones que pueden poner en peligro a los conductores en la vía, al igual que saber cómo no cometerlas para ahorrarse multas. Sobre esta temática se pronuncia una abogada y creadora de contenido, @telodicealba.
Multas inesperadas
Según explica esta instagrammer en una publicación con más de 20.000 seguidores en la red social, hay sanciones que pueden llegar a resultar “absurdas” debido a lo poco normales que resultan, sorprendiendo a todo tipo de conductores.
En su vídeo, @telodicealba detalla todas y cada una de las acciones que considera sin sentido. Muchas de ellas son cotidianas, pero son poco conocidas y son un claro motivo de sanción de acuerdo a la normativa que establece el reglamento vigente.
Gestos cotidianos
Uno de los gestos que conllevan sanción, según Alba, es repostar en la gasolinera mientras se tiene el teléfono móvil encendido. En este caso, acarrea una multa de 80 euros, y la razón se debe al peligro de explosión o interferencia.
También hay otros casos, como hacer movimientos obscenos (peinetas, por ejemplo), insultar a otros usuarios de la vía desde el vehículo, o incluso besar al copiloto o morderse las uñas al volante, que pueden ser objetivo de sanciones.
Otras distracciones
Por otro lado, hay más distracciones que suponen una infracción que cuesta 200 euros. Una de ellas es colocar señales o avisos con el cartel de “Se vende” en un automóvil, ya que puede limitar la visibilidad. Repostar el coche con la radio encendida también es motivo de multa.
Asimismo, maquillarse dentro del vehículo mientras se circula, conducir con la matrícula sucia o usar el coche como un segundo baño, además de infracción, pueden provocar pérdida de puntos del permiso.
También a los peatones
Los peatones tampoco están a salvo de estas sanciones. Pasear por el lado incorrecto de la carretera puede suponer una multa de 80 euros, mientras que cruzar un semáforo que está en rojo, de 200 euros.
Detalles que marcan la diferencia
Lo más importante para hacer frente a estas infracciones es centrarse en todos los detalles del conductor. Revisar el reglamento para no llevarse un susto tampoco está de más en estas circunstancias.
No hay que usar el móvil, salvo si se trata de emergencias. El teléfono es, sin duda, una fuente de distracción que provoca situaciones peligrosas, motivo por el cual debe estar alejado s mientras conducimos.
Así, centrar la atención del conductor única y exclusivamente en el estado de la carretera y estar controlando todo lo que ocurre es la mejor solución para que el coche no recibir una infracción.
Y no olvidar que es responsabilidad de todos, tanto de conductores como de peatones, mantener en buen estado la vía. Ya sea respetando señales y extremando la prudencia, todo pasa por el respeto y la convivencia.