Cuando la filosofía Montessori empezó a adquirir cierta fama, a muchos les pudo parecer una nueva moda o un método revolucionario en lo referente a educación infantil, pero lo cierto es que esta idea la desarrolló la doctora María Montessori en 1912. Es decir, que a pesar de ser un tipo de pedagogía centenaria, nunca ha estado tan de actualidad como hoy en día.

Se empezó a hablar de ella hace ya varios años, pero ha calado y sus bases siguen tan presentes como el primer día. Una de sus principales ideas es generar las condiciones más propicias para desarrollar la libertad individual de cada niño, sin necesidad de una supervisión constante. Se desarrolla de forma especial en algunas escuelas y colegios, pero ¿cómo se aplica a la decoración del dormitorio de los niños? Sobre todo con muebles a ras de suelo que permitan a los más pequeños moverse libremente. 

Las firmas de decoración han tenido muy presente las directrices de este método y en sus colecciones es muy habitual encontrar bonitos diseños de camas bajas, muebles sin apenas altura, ya sean cajoneras o estanterías, que siguen la misma línea y están al alcance de los niños, y elementos decorativos como alfombras, cojines y puffs que invitan a estar descalzo y tirarse en el suelo para jugar y desarrollar su imaginación.

Colores

Además del mobiliario, los expertos aseguran que los colores pueden ser un aliado a la hora de estimular el carácter de un niño, y en este caso la idea es crear un ambiente de tranquilidad y armonía, por lo que lo más acertado es escoger tonos cálidos y suaves. Por ejemplo, los arena, que tan de moda están esta temporada, son perfectos para combinar con muebles en blanco o en madera natural. 

El orden también es clave y, según aconsejan, nada de habitaciones plagadas de juguetes por todas partes, mejor menos pero bien elegidos. El método Montessori recalca que los juegos y juguetes estén ordenados y clasificados para que los niños puedan acceder fácilmente a ellos, e incluso, dependiendo de la edad, puedan llegar a planificar sus propias dinámicas.

Existen muchos diseños de juguetes inspirados en esta pedagogía, adaptados a cada edad, y casi siempre son de materiales nobles. Las torres de aprendizaje y los juegos confeccionados con tablas o bloques de madera son más que suficiente para ayudar a desarrollar sus habilidades. 

Propuestas

Tipi para jugar y decorar la habitación.

Tipi para jugar y decorar la habitación. Ikea

Tipis y casitas de tela. Los tipis gustan mucho como elemento decorativo en las habitaciones infantiles. Son bonitos, vistosos y pueden dar lugar a cantidad de juegos. Este es un diseño de Ikea.

Torre de aprendizaje para desarrollar varias habilidades y el equilibrio. Sklum

Juguetes de madera. Los juguetes de madera apuestan por un aprendizaje ecológico y sostenible a través del enfoque Montessori, y es fácil encontrar todo tipo de juegos y torres de aprendizaje, como este triángulo de Sklum para desarrollar su equilibrio, coordinación y autonomía.

Estantería a modo de bibiloteca infantil.

Estantería a modo de bibiloteca infantil. Maison du Monde

Un rincón de lectura. A modo de pequeña biblioteca, este tipo de estanterías dejan a la vista las portadas de su colección de libros y puede invitar a elegir el que más le guste. Lo mismo con los juegos, bien ordenados y a su alcance. Este diseño se puede encontrar en Maison du Monde.

Los textiles de suelo invitan a tumbarse a leer o jugar.

Los textiles de suelo invitan a tumbarse a leer o jugar. Lorena Canals

Puffs y cojines. Los puffs pueden convertirse en un asiento extra para jugar, leer... En esta propuesta de Lorena Canals se han combinado varios modelos –todos desenfundables para lavar en la lavadora– para crear un rincón de juego en el suelo.