La época navideña es el momento más esperado del año en el que comidas y cenas abundantes, momentos emotivos y encuentros familiares tienen lugar. En el caso de Nuria Roca, esta tiene en su libreta de recetas personal una que aprendió de su madre: la col lombarda. Hablamos de un plato tan vistoso como saludable, apto para sorprender a todos los comensales en estas fechas tan señaladas.
Aunque Nuria Roca no ha desvelado todos los detalles de la receta de col lombarda de su madre, sí que ha dejado entrever algunas pinceladas. Para la elaboración de esta apuesta culinaria, el proceso comienza por hervir una col. A continuación, y una vez esté en su punto, se corta en tiras finas, desechando las hojas exteriores y el tallo. Se coloca la col en una olla con agua y sal, y se cuece durante 20 minutos. Más tarde, se cogen las tiras y se saltean con pequeñas cucharadas y pizcas de los siguientes ingredientes: cebolla, ajo, canela, clavo, azúcar moreno y vinagre de manzana. Tras remover la mezcla un poco, dejamos que se caramelice. Luego, se incorpora la col a la sartén y se mezcla con el sofrito, añadiendo varias pasas y piñones, y sal pimienta. Finalmente, y habiéndola dejado reposar unos 10 minutos, la col lombarda se sirve caliente o templada.
Al margen de su atractiva presentación, la col lombarda proporciona innumerables beneficios. Su inconfundible color morado se debe a la presencia de antocianina, un pigmento que posee propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, entre muchas otras. Estas propiedades son beneficiosas para todo el sistema inmunológico, así como para la salud ocular y cardíaca. Asimismo, la col lombarda es rica en vitamina C, fortaleciendo las defensas. Al mismo tiempo, el ácido fólico ayuda a la formación de glóbulos rojos a la par que evita malformaciones en el feto durante el embarazo. Respecto al azufre, otro de los componentes de la col lombarda, contribuye a la eliminación de líquidos y toxinas, previniendo infecciones y mejorando la piel. Beneficios que resultan muy útiles para combatir los excesos alimenticios, tan comunes en las navidades.
Breve historia
La col lombarda era como ‘el pavo de la huerta’ en el siglo XVIII, sobre todo por su elevado valor nutritivo y resistencia a casi cualquier clima. Sus raíces se remontan a Castilla y León y la Comunidad de Madrid, cuya receta tradicional se basaba en saltearla con cebolla, pasas, piñones y vinagre, además de especias como canela, anís y clavo. El resultado final es un plato vistoso que se puede servir bien como primero o bien como acompañamiento de carnes o pescados.
