La calidad de los alimentos no solo radica en su sabor, sino también en los valores que acompañan su producción. En Euskadi, estos valores encuentran un referente en Eusko Label, la marca que certifica productos agroalimentarios de primera calidad obtenidos bajo los más estrictos criterios de bienestar animal, sostenibilidad y respeto por el medio ambiente. El sello garantiza la trazabilidad y frescura de lo que llega a nuestra mesa, y lleva implícito el compromiso con una alimentación ética y saludable. No es poco.
El sello Eusko Label certifica productos agroalimentarios de primera calidad obtenidos bajo los más estrictos criterios de bienestar animal, sostenibilidad y respeto por el medio ambiente
El bienestar animal es uno de los pilares de Eusko Label. El consumo consciente y el público preocupado por el origen y la elaboración de los alimentos cobran cada vez más relevancia. Por ello, saber que los animales han sido criados en condiciones óptimas, con acceso a pastos y alimentación natural, permite disfrutar de cada bocado con la certeza de que se ha respetado el ciclo natural de vida. Este enfoque mejora la calidad de los productos y contribuye a mantener la biodiversidad local, apoyando el trabajo de los pequeños ganaderos y agricultores que se esfuerzan en ofrecer lo mejor de la tierra y sus animales.
El resultado de todo este proceso es un producto que va más allá de lo puramente gustativo: es un alimento que cuida de nuestra salud, respeta el entorno y ofrece una experiencia gastronómica inigualable.
Bonito del norte, atún rojo, antxoa, carne de vacuno, pollo de caserío, cerdo de caserío, cordero lechal... Sin olvidarse de productos vegetales de primera liga como las legumbres, los tomates, la patata de Álava, el pimiento de Gernika, las guindillas de Ibarra, el aceite de oliva virgen extra... Es pronunciar la lista de alimentos y, automáticamente, empezar a salivar. Porque además de su potente sabor, todos los productos que llevan el sello Eusko Label, bien sean frescos o elaborados, tienen el requisito de la calidad como baluarte fundamental e imprescindible para estar en el mercado.
Bonito del norte, atún rojo, antxoa, carne de vacuno, pollo de caserío, cerdo de caserío, cordero lechal... Las legumbres, los tomates, la patata de Álava, el pimiento de Gernika, las guindillas de Ibarra, el aceite de oliva virgen extra...
De la excelente materia prima al plato y al estómago, a continuación te proponemos un menú de cinco estrellas, elaborado con productos Eusko Label, pensado para deleitar el paladar y honrar la tradición culinaria vasca.
Entrante: Pimientos del Gernika en tempura con salsa de queso

Ingredientes para 4 personas:
- Pimientos de Gernika con Eusko Label
- 1 yema de huevo de Caserío con Eusko Label
- 500 g de agua
- 100 g de harina
- 1 l de nata
- 150 g queso Saroi elaborado con leche del País Vasco
- Sal de manantial con Eusko Label y pimienta
Preparación
Calentamos la nata en una cazuela hasta que comience a hervir para la salsa de queso. En ese momento, incorporamos el queso rallado fino y removemos bien. Dejamos que vuelva a hervir, luego colamos la mezcla y ajustamos con sal y pimienta al gusto. Para la tempura, mezclamos agua muy fría con la yema de huevo y la harina, batiendo hasta obtener una masa suave.
En este momento, rebozamos los pimientos de Gernika primero en harina y luego en la masa de tempura. Los freímos en abundante aceite caliente hasta que estén dorados y crujientes y los dejamos escurrir en un papel absorbente. Un entrante delicioso para ir abriendo boca.
Primer plato: Tosta de antxoas rebozadas sobre puré de calabaza y cebolla caramelizada

Ingredientes
-Para las antxoas:
- 3 antxoas Eusko label
- 1 huevo de Caserío vasco
- 100 g de harina de garbanzo
- Aceite de oliva virgen extra con Eusko Label
- Sal de manantial con Eusko Label
-Para el puré de calabaza:
- 200 g de calabaza
- 1 puerro, 1 zanahoria y 1patata pequeña
- Aceite de oliva virgen extra con Eusko Label
- Sal de manantial con Eusko Label
- Pimienta
- 1 rebanada de hogaza de pan Euskal Ogia tostada
- 1 cebolla pochada
Preparación
Para preparar las antxoas, lo primero que tenemos que hacer es limpiarlas bien para luego sazonarlas y pasarlas por harina y huevo batido. A continuación, las freímos en aceite muy caliente y las reservamos en un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Para hacer el puré de calabaza, debemos limpiar, pelar y trocear todas las verduras, y ponerlas a cocer en agua durante 25 minutos. Si es necesario, rectificamos el agua, salpimentamos al gusto y batimos hasta obtener la textura deseada. Terminamos añadiendo un chorrito de aceite de oliva en crudo y removemos bien.
Finalmente, colocamos una rebanada de pan tostado en el plato, hacemos una cama con el puré de calabaza, ponemos las antxoas encima y terminamos añadiendo la cebolla caramelizada. ¡A disfrutar!
Segundo plato: Pierna de Cordero Lechal guisado

Ingredientes para 4 personas:
- 1,6 kg pierna de cordero lechal del País Vasco
- 500 g de cebolla
- 125 g de zanahoria
- 250 g de puerro
- 25 g de ajo
- 100 g de tomate triturado
- Romero, tomillo y pimienta negra
- 100 g de brandy
- 100 g de txakoli
- Aceite de oliva virgen extra con Eusko Label
- Agua
- Sal de manantial con Eusko Label
Preparación
Salpimentamos las piernas del cordero lechal y las doramos en una cazuela. Una vez doradas, las retiramos y, en esa misma cazuela, añadimos la verdura picada, pochándola a fuego lento. Cuando esté bien hecha, vertemos el brandy y el vino blanco, dejamos reducir. A continuación, añadimos el tomate, el romero y el tomillo, rehogamos durante cinco minutos y finalmente incorporamos las piernas.
Cubrimos todo con agua y cocemos a fuego lento hasta que las piernas estén tiernas (aproximadamente una hora). Cuando estén listas, las sacamos, colamos la salsa y la ligamos con un poco de harina de maíz refinada.
Ahora solo queda, volver a meter las piernas en la salsa, calentar bien y servir.
Postre: Crema de chocolate y miel

Ingredientes:
- 400 g de nata
- 800 g de cobertura de chocolate
- 80 g de miel con Eusko Label
- Nueces peladas
Preparación
Para realizar este postre tan sugerente, tenemos que poner la nata a hervir, en primer lugar. Mientras tanto, colocamos el chocolate y la miel en un bol. Una vez que la nata haya hervido, la vertemos sobre el chocolate y la miel, y batimos hasta obtener una crema homogénea. Repartimos la mezcla en cuencos individuales y la dejamos enfriar. Una vez fría, decoramos con nueces peladas y a relamerse los dedos.