Comenzaron siendo alimentados por dos vecinas de Judimendi y pasando las horas y noches gélidas del invierno vitoriano sobre “cuatro maderas en el suelo”. Ahora, esta colonia felina compuesta por trece gatos, disfruta a pierna suelta de su nuevo y cálido hogar, situado en el pequeño huerto vallado de la escuela para adultos EPA El Carmen (Avenida Judimendi).

Y ello ha sido posible gracias a la colaboración y el trabajo de ocho alumnos del taller de Carpintería y Mueble. Los mismos que, partiendo de un boceto inicial, escogieron la madera y la serraron hasta convertirla en casetas bien acondicionadas sobre una amplia base del mismo material.

El resultado, sin ir más lejos, ha dejado más que satisfechos a los nueve voluntarios de la asociación alavesa La Gatcueva. Su presidente, Jhonathan Aldeano, cuenta a este diario cómo se puso en contacto con el centro a fin de crear un espacio más favorable para estos gatos. “Nuestra idea era esterilizar, controlar aquello y ponerlo más bonito. Desde el día uno se mostraron conformes con todo”, apunta.

Como muestra de agradecimiento, el pasado viernes Aldeano y otra de las voluntarias de la entidad felina se acercaron a las puertas del colegio con un pequeño aperitivo y con el objetivo de poder seguir visibilizando la actividad que llevan a cabo con la comunidad gatuna.

Dos alumnos del taller de Carpintería y Mueble trabajan con la madera.

Queremos hacer ver que la gente puede participar y desarrollar cosas bonitas”, expresa el gasteiztarra. De hecho, la idea es “ir poco a poco a colegios e ikastolas para ofrecer charlas e involucrar a los jóvenes, que, al final, son el futuro”.

Proyecto CER

Actualmente en Gasteiz existen unas 200 colonias de gatos distribuidas por distintas zonas de la ciudad, bajo el control y el seguimiento del Ayuntamiento de Gasteiz a través del Grupo Alavés para la Defensa y Estudio de la Naturaleza (GADEN). “La gente no lo sabe exactamente pero hay muchísimas”, expone Aldeano.

En este sentido, el gasteiztarra habla del proyecto CER (Captura, Esterilización y Retorno a su lugar de origen). Un método ya consolidado en Vitoria pero que aún queda por instaurar en la zona rural de Álava.

"Lo ideal es que haya el 80% de gatos esterilizados en cada colonia para que el número no siga subiendo y se mantenga"

Queremos llevarlo a los pueblos. Presentar este método a los alcaldes para futuros convenios, organizar charlas para darlo a conocer y poder implementarlo en estas zonas. Lo ideal es que haya el 80% de gatos esterilizados en cada colonia para que el número no siga subiendo y se mantenga”, explica. Aún y todo, asegura que “por mucho que intentemos mantenerlo aparecen gatos de otros sitios, abandonados y también bebés”. 

Lo cierto es que, más allá de rescatar y cuidar a gatos callejeros, la asociación alavesa nació –hará año y medio– como herramienta para otras asociaciones felinas del Estado; brindando, principalmente, apoyo económico y de difusión a través de la web online y sus respectivas redes sociales. Además de almacenar distintos planes y propósitos; entre ellos, el Proyecto Alas, que pretende dar soluciones de movilidad a gatos, perros y otros animales que lo necesiten. “Hacemos sillas de ruedas y prótesis con impresión 3D. Ajustando la pieza al tamaño del animal”, detalla Aldeano.

Por otro lado, en los planes a futuro de La Gatcueva entra la obtención de una espacio físico, una especie de refugio, para ubicar allí a los felinos que vayan rescatando, ya que, por el momento, el único espacio real que tienen son las propias casas de las personas voluntarias. Por arrojar datos, el año pasado rescataron y dieron posteriormente en adopción un total de 19 gatos.

"Hay gente que rompe los comederos"

No en vano, Aldeano insiste en la importancia de concienciar sobre la realidad de las colonias felinas, lejos de los prejuicio sociales. “Cuando montamos una, no solo tenemos críticas de la gente que camina por la calle, sino también de algunas asociaciones, porque tienen miedo de que se vea el lugar en el que se ubica su gato. Hay gente que rompe los comederos o directamente les quita la comida”, cuenta.

Colonia de gatos Archivo DNA

“Hacia los gatos existe la misma percepción que hacia las ratas. De suciedad. Parece que tenemos que esconderlos en una esquina para que no se les vea. Y eso tampoco ayuda. Por desgracia, nos queda para largo”, expone el presidente.