La población reclusa de Álava alcanzó durante el pasado mes de septiembre las 904 personas, según las últimas estadísticas que ha elaborado al respecto el Departamento de Justicia del Gobierno Vasco.

Se trata de la mayor cifra del año, si se tienen en cuenta las 877 personas presas que había en agosto, las 884 de julio, las 892 de junio, las 894 de mayo (que era el número más alto hasta la fecha), las 875 de abril, las 869 de marzo, las 880 de febrero o las 851 de enero. Además, si las cifras de septiembre se ponen en contexto con las que había en ese mismo mes pero del año anterior, esto es, el de 2023, también evidencian un incremento del 5,11% (860).

Y no solo en Zaballa, la cárcel con más capacidad y la más moderna, ha ido creciendo la cuantía de reos, sino en todo Euskadi, dado que el último número al respecto, el de septiembre, era de 1.671 (433 de ellas en Bizkaia y 334 en Gipuzkoa), frente a las 1.592 que había en esa treintena de 2023 y las 1.387 de 2021.

Más desde la transferencia de la gestión

Un suma y sigue “que no deriva de un aumento de la criminalidad”, sino de los numerosos reclusos que han pedido venir a los penales vascos desde que en 2021 Madrid dejó de gestionar las cárceles vascas de adultos.

De hecho, en el informe del Departamento de Justicia que publicó con motivo de los dos años de gestión penitenciaria en Euskadi, detalla que 656 solicitudes para realizar un traslado a Euskadi, se denegaron 384, ya que hay un “tensionamiento” en el grado de ocupación actual.

Interior de la cárcel de Zaballa. Alex Larretxi

Traspaso

“Desde el traspaso, lógicamente, ha aumentado la población penitenciaria en Euskadi, ya que se acoge a más personas de las que pueden ser trasladadas a centros de fuera de la CAE. Se espera que la capacidad operativa máxima aumente razonablemente con la puesta en funcionamiento del nuevo Centro Penitenciario Gipuzkoa y la nueva relación de puestos de trabajo en tramitación”, explica este balance del Ejecutivo vasco.

En cuanto al tipo de régimen de las 904 personas que están internas en Zaballa, la gran mayoría (819) se encontraban penadas, frente a las apenas 84 que estaban en condición preventiva. Aparte, una de ellas estaba internada judicialmente.

Muchos más hombres

Por sexos, no es posible concretar cuántas mujeres y hombres estaban privadas de libertad en Álava, ya que ese dato se da a nivel de toda la Comunidad Autónoma Vasca (CAV). Pese a ello, está claro que un gran mayoría de la población que cumple su pena en las cárceles vascas tiene rostro masculino, puesto que 1.537 son hombres y solo 137 son mujeres.

Extranjeros

Las personas de origen extranjero que cumplían su pena en Álava, a fecha del pasado septiembre, ascendían a 290, lo que representa un 32% y nuevamente, con claro predominio masculino, al haber 275 hombres en comparación con las 15 féminas. En total, en los presidios vascos había 548 personas foráneas (156 en Bizkaia y 102 en Gipuzkoa).

Por edades

Por edades, hay dos franjas con los datos más abultados. La primera de ellas, según el total de Euskadi, es la de 41 a 50 años, ya que en ella figuran 474 personas privadas de libertad. Y la segunda es la de 31 a 40 años, con 451 reos. La tercera es la de 26 a 60 años, con 221 presos. Algo más lejos queda la cuarta con más reclusos, la de 21 a 25 años, con 143

En cuanto al número de personas en libertad condicional, respecto al total de 163 que había en Euskadi en el noveno mes del año (143 hombres y 20 mujeres), la mayoría de ellas estaba en territorio vizcaíno (92), seguidas de las 46 de Gipuzkoa y las 25 de Álava abundan también los varones, con 19). 

Tipo de grado

Por grados, la gran mayoría de la población reclusa de Zaballa, con datos siempre a fecha del pasado mes de septiembre de 2024, estaba en el segundo grado (686), que son los que pueden llevar una vida “normalizada” dentro del centro, salir más horas de la celda y al patio y participar en las actividades programadas.

Le siguieron 126 que estaban “sin clasificar” y 83 que estaban en tercer grado o semilibertad, dado que es el régimen que permite a los reclusos que han sido condenados a una pena privativa de libertad cumplirla fuera del centro penitenciario.

Aparte de los anteriores, había nueve en primer grado, que solo se aplica a los presos peligrosos o considerados de alto riesgo, por lo que se les interna en módulos de aislamiento.

Esta clasificación alavesa no difiere mucho de la del total de Euskadi, donde constaban 879 en el grado 2, 473 en el tercero, 310 “sin clasificar” y nueve en el primer grado.

  • ACCIONES PARA IMPULSAR LA RESOCIALIZACIÓN

Para impulsar la resocialización en el ámbito comunitario de las penas y medidas alternativas, así como los regímenes de semilibertad, desde la transferencia de la gestión penitenciaria en 2021, se ha favorecido la creación de una red de inserción social en el ámbito comunitario, tejiendo alianzas con otras instituciones y con el tercer sector social.

Así, se han formado grupos de trabajo con los Departamentos de Seguridad, Salud y Educación, además de la relación colaborativa con los servicios sociales forales.

Junto a ello, se han desarrollado encuentros de cooperación con los Juzgados de Vigilancia Penitenciaria y la Fiscalía, así como con la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias del Estado y la Administración penitenciaria catalana.


ASISTENCIA LEGAL

Igualmente, se han institucionalizado reuniones periódicas con los Colegios de la Abogacía para reforzar el turno de asistencia legal penitenciaria, la formación en Derecho penitenciario y la comunicación telemática.

También se han suscrito acuerdos con diversas confesiones religiosas, como la católica y la musulmana. Y se han potenciado las penas y medidas alternativas, como los trabajos en beneficio de la comunidad, tras un acuerdo con Eudel.


PISOS DE ACOGIDA

Otra de las acciones clave desde 2021 es que se ha constituido una red de pisos de acogida para internos e internas en tercer grado penitenciario o de permiso penitenciario, que permite la derivación directa a estos recursos, “ganando en agilidad”.

Para atender las especiales necesidades de los hijos e hijas menores de las personas en prisión, se ha puesto en funcionamiento el servicio Kuttunak, de atención psicosocial, ofreciéndoles ayuda socioeducativa y psicoterapéutica.

Asimismo, se ha elaborado un protocolo de comunicación con el servicio de Asistencia a la Víctima en materia de ingresos y excarcelaciones.


TRANSPORTE A ZABALLA

Por último, se ha pasado a gestionar el servicio de transporte público de las personas internas a Zaballa, anteriormente prestado por la Diputación Foral de Álava y se ha puesto en marcha la estrategia de Justicia Restaurativa 2022-2025.