El gobierno municipal anuncia que inyectará una partida de dinero a la conservación del patrimonio municipal en los presupuestos de 2025.
Es decir, que destinará una partida presupuestaria a un plan conjunto de valoración y actuaciones en palacios y edificios deteriorados que el Ayuntamiento tiene por la ciudad, sobre todo en el Casco Viejo, caso de Escoriaza-Esquível.
A día de hoy, el palacio renacentista está cerrado y sin uso. “La mejor manera de conservarlo es darle un uso”, considera el concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez, en referencia tanto a este edificio, como a otros en mal estado.
Hispania Nostra
Escoriaza-Esquível está en la lista roja de patrimonio en mal estado de Hispania Nostra por problemas estructurales, filtraciones de agua en el patio y plagas que pueden generar daños irreversibles en la piedra del excepcional patio.
Sin embargo, el gabinete Etxebarria asegura que “no padece ningún deterioro estructural”, según los técnicos municipales, cuya valoración difiere de la de Hispania Nostra.
Estabilizado y sin peligro
Explica el concejal Borja Rodríguez, ante las preguntas de los partidos de la oposición EH Bildu, PP y Elkarrekin, que el edificio se encuentra estabilizado y no supone un peligro de empeoramiento.
Y añade que las filtraciones de agua no han generado daño en la estructura del palacio. “El Ayuntamiento mantiene las medidas de vigilancia en cuanto a su mantenimiento para su conservación, como la eliminación de entradas de agua, sobre todo, desde la cubierta”, informa Rodríguez.
Con todo, el gobierno municipal es consciente del deterioro de parte del patrimonio arquitectónico de la ciudad, propiedad del Ayuntamiento. De ahí que avance la puesta en marcha de una línea presupuestaria en las cuentas municipales de 2025, con el fin de realizar un diagnóstico y un plan global de actuaciones a medio plazo.
A corto plazo, los problemas ya se analizan en la redacción del Plan Especial de Rehabilitación Integral del Casco Viejo (PERI) y en el área de Planeamiento, que tiene encomendada la revisar el catálogo del patrimonio de Vitoria
Más adelante, a largo plazo se ejecutarán acciones para restaurar y poner en valor edificios y palacios municipales ahora deteriorados y en mal estado.
"Dejadez"
Por parte de la oposición, el concejal de EH Bildu Xabier Ruiz de Larramendi habla de “dejadez” por parte del gobierno municipal y “falta de mantenimiento”, lo que ha acarreado “problemas estructurales graves” que impiden que el palacio renacentista se abra al público al no poder garantizarse su seguridad.
El portavoz del PP, Iñaki García, propone realizar un plan para definir el mejor uso para el palacio, tanto público como privado, y de la necesidad de recuperar el patrimonio histórico de la ciudad en su conjunto. “No han hecho nada durante los últimos ocho años y eso ha provocado el deterioro del palacio”, critica.
Falta de seguridad
El concejal de Elkarrekin Óscar Fernández señala que el estado del palacio lleva más de dos legislaturas sobre la mesa sin que el gobierno municipal haya aportado ninguna solución. Lamenta su falta de utilidad por el deterioro y los problemas estructurales graves que impiden un uso seguro del edificio situado en el Casco Viejo de Gasteiz.
Pregunta también Elkarrekin por el futuro uso del palacio Álava-Esquível, propiedad de la municipal de Tánger, y cómo va a afectar a los actuales residentes, pero no aporta novedades el concejal de Urbanismo, limitándose a decir que se estudian varias opciones.
Sin novedad en Álava Esquível.
Conversaciones Vitoria-Tánger. El concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez, manifestó ayer que no hay novedades sobre la reforma del palacio Álava-Esquível. El edificio de la calle Herrería necesita una urgente rehabilitación a la que aún no ha hecho frente su propietario, la municipalidad de Tánger, que mantiene una deuda de 421.000 euros en multas no abonadas al Ayuntamiento de Vitoria. Necesitado de una urgente reforma y con una malla protectora para evitar desprendimientos, actualmente es un inmueble residencial. Tampoco aclara Rodríguez a Elkarrekin, si el futuro uso que se va a dar al palacio, afectará a las personas que viven en el edificio, ahora que Vitoria y Tánger andan en conversaciones.
