La asociación vecinal Arelegi tiene claro que el barrio de Goikolarra de Vitoria que representa su colectivo merece un equipamiento “digno” para el barrio, “de manera que garanticemos el desarrollo de actividades integradoras sin necesidad de desplazarse a otros barrios para acceder a instalaciones municipales”.
Actualmente, muchas de sus actividades las desarrollan en el Gardeleku, la casa de juntas del Gardelegi, por ser la sede de este colectivo vecinal, que, como alerta, se ha quedado pequeño para sus 325 personas socias y teniendo en cuenta que unos 3.000 residentes han elegido este distrito, ubicado en el sector 19 entre Aretxabaleta y Gardelegi, para fijar allí su residencia.
"Lo difícil es hacerlo en un espacio que se queda absolutamente pequeño en aforo y que cuenta con un uso muy intensivo por todas las actividades que realizamos. Es muy complicado llevar a cabo dos actividades a la vez por la falta de espacio"
Y sus habitantes pueden aumentar más porque hay allí obra residencial nueva. De ahí que opine que “merece un local más grande y mejor adaptado, con distintas salas y demás. Lo difícil es hacerlo en un espacio que se queda absolutamente pequeño en aforo y que cuenta con un uso muy intensivo por todas las actividades que realizamos. Es muy complicado llevar a cabo dos actividades a la vez por la falta de espacio”.
Cuadrar horarios
Los lunes y miércoles, por ejemplo, dan allí yoga por la tarde y los martes y jueves es el de la Goikoteka.
Por eso, con la nueva iniciativa del Círculo de Madres se las han tenido que ingeniar para cuadrar horarios y así poder dar sus sesiones “porque si para hacer una actividad, tienes que quitar hueco a otras, es un rollo.El barrio está creciendo y tenemos unas necesidades”
