Vitoria afronta este martes su cuarto día de huelga en los autobuses de Tuvisa, cifrada en un 100% de seguimiento según los convocantes, con una doble manifestación (por la mañana y por la tarde) y con la vista puesta en la próxima reunión que tendrá lugar el jueves.

No en vano, ese día, desde primera hora, comité y empresa volverán a sentarse para intentar zanjar este conflicto que ya ha rebasado los dos meses de negociaciones.

“Se está trabajando en ello”, destacan fuentes municipales a la pregunta de si continúan con la intención, como manifestó el pasado lunes el presidente de esta sociedad municipal de autobuses de Vitoria, Iñaki Gurtubai, de presentar una nueva propuesta a la parte social.

Acercar posturas

El objetivo de la misma es que sirva para acercar posturas, puesto que las principales reclamaciones de la plantilla siguen estando en una "mejora general del servicio", con más autobuses en la calle, e incluir un sistema de registro de los tiempos de trabajo, tal y como han evidenciado los trabajadores con los múltiples carteles con los que han empapelado marquesinas y farolas.

Esta última oferta en la que trabaja el Ayuntamiento es la que se llevará y analizará en el nuevo encuentro del jueves.

Cabe recordar que a comienzos de esta semana, tanto la alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria, como Gurtubai, confirmaron que a lo largo de estos días convocarían al comité para una nueva reunión con el fin de evitar la huelga.

Ambos representantes institucionales aseguraron que las negociaciones seguían abiertas y pidieron a los trabajadores “que “hagan una profunda reflexión de los acuerdos a los que se está llegando y del malestar colectivo que están generando en la ciudad”.

Última manifestación de los trabajadores de Tuvisa por el centro de Vitoria Pilar Barco

“Poco flexibles”

Hoy mismo, Gurtubai ha reiterado que “intentaremos llegar a un acuerdo, pero no es tan sencillo porque los trabajadores están siendo poco flexibles”.

Aparte, reconoce estar “preocupado” por la deriva que están tomando las negociaciones. En este sentido, cabe recordar, que la plantilla ha acusado a la empresa de “dilatar artificialmente el conflicto”.

“Mi trabajo es llegar a un acuerdo”, ha subrayado de nuevo el presidente de Tuvisa en una entrevista en Radio Vitoria, en la que ha vuelto a declarar que hay que tener en cuenta el “interés general, no solo el de los empleados municipales”.

Desencuentros

Así las cosas, uno de los grandes desencuentros sigue estando en las reclamaciones que hace la plantilla para que se les contabilice los tiempos que tienen que ver con “en el toma y deje” de los autobuses. Por ejemplo, desde que se montan en el vehículo y se trasladan hasta la línea.

Un tiempo que, como censuran, “puede ser de diez minutos en las paradas más cercanas”, precisa el portavoz del comité, Asier López de Sabando.

Y, en esta petición para cambiar el sistema de fichaje, siguen las fricciones, porque Gurtubai cree que en realidad, consiste en un “compútame más de 8 horas para tener más días de libranza”.

Inspección de Trabajo

El comité, por su parte, ha informado de que Inspección de Trabajo ha detectado incumplimientos en el registro de la jornada laboral en Tuvisa y ha abierto un acta de infracción, que el Ayuntamiento ha recurrido, en la que daba un mes de plazo para cambiar de método.

En concreto, el pasado 5 de octubre fue cuando se inicia esta actuación inspectora, momento en el que solicita a Tuvisa un documento explicativo sobre “el sistema implementado para garantizar el registro de la jornada laboral”.

Tras su análisis, determinó que el método de fichaje a través de las máquinas de cobro, no garantiza “un registro objetivo y fiable”, en tanto que excluye el tiempo trabajado fuera del vehículo al inicio y final de la jornada del personal conductor y que la gestión remota de las máquinas de cobro puede registrar “un inicio y finalización que no refleja la jornada de trabajo real”.

En consecuencia, se requiere a la empresa que proceda a subsanar estas deficiencias detectadas.

Para López de Sabando esta resolución de Inspección es “contundente” y en ella “se desmonta punto por punto las mentiras de la alcaldesa y del señor Gurtubai respecto al tema del fichaje”.