El proyecto universitario y deportivo que el grupo Baskonia quiere levantar cerca de los humedales de Salburua, Innovaraba, sigue dando pasos.

Ya ha obtenido licencia de parcelación, según confirmó ayer el gabinete Etxebarria, lo que le permitirá dividir la parcela para construir una residencia de estudiantes, un edificio universitario, campos de fútbol y una balsa artificial para la protección de la fauna, en especial de la rana ágil que vive en el entorno y que podría verse afectada por este plan urbanístico.

El grupo Baskonia ya tiene permiso municipal para parcelar el terreno de Salburua sobre el que quiere construir una residencia de estudiantes, un edificio universitario, campos de fútbol y una balsa para la fauna

“Más presión para esta especie”, critica Elkarrekin, para quien el proyecto es un “despropósito ambiental la urbanización a escasos veinte metros del acuífero”, por lo que pide que se cambie de ubicación. Según el concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez, es el Gobierno Vasco el competente de realizar el estudio de impacto ambiental y el que decidirá si da luz verde o no antes de conceder las cuatro licencias de obra solicitadas por el grupo empresarial.

Y es que, a pesar de los pasos que todavía quedan por dar, el portavoz de Elkarrekin, Óscar Fernández, sigue mostrado su preocupación por la presión urbanística sobre una de las joyas ambientales de la ciudad.

Asimismo, Rodríguez explicó ayer que en lo que a la parcela de Salburua destinada a la ampliación de la actual zona deportiva del Baskonia y Alavés (Bakh) se refiere, la cuestión de licencias ya está resuelta desde hace tiempo por parte de los técnicos municipales.