103 bares de Vitoria han presentado sus estudios de insonorización y 53 han solicitado subvenciones, de las que 43 han sido abonadas. Son los datos que ha ofrecido este martes en comisión el concejal de Medio Ambiente, Borja Rodríguez, a preguntas de EH Bildu, teniendo en cuenta que en 2024 acaba la moratoria que el pasado año aprobó el Pleno de Vitoria, por unanimidad, para que los establecimientos hosteleros cumplieran con la ordenanza de ruidos y vibraciones sacada adelante en 2010 y cuyo plazo inicial expiraba a finales de 2022.

Según datos de mayo de 2022, la obligatoriedad de aislamiento acústico podría afectar a un total de 1.783 establecimientos en la capital alavesa. De ellos, solo un 19% cumpliría con el aislamiento acústico exigible en sus locales, mientras que un 45% no habría podido adaptarlos aún y un 1% estaría fuera de ordenación. Del 34% restante, el Consistorio no disponía de información alguna sobre el grado de adaptación a la actual ordenanza.

Pero, a día de hoy, el propio Rodríguez ha reconocido que todavía existe “un porcentaje muy elevado” de establecimientos de hostelería de los que que se carece de datos en relación a esta materia.

Dos nuevas líneas de ayudas

Con el fin de acelerar este proceso, ha anunciado que el Consistorio valora dos nuevas convocatorias de ayudas: una, destinada a financiar el coste del estudio acústico, que está estimado entre los 400 y 600 euros, y otra a subvencionar las actuaciones de los que se encuentran fuera de ordenación, que son 12, de los que se tienen constancia.

“Confió en que si finalmente se lanza esta nueva línea de financiación para el estudio, serán más los que se animen y reciba el Ayuntamiento”

“Confió en que si finalmente se lanza esta nueva línea de financiación para el estudio, serán más los que se animen y reciba el Ayuntamiento”, desea Rodríguez.

Envío de circulares

En abril de 2022, el Ayuntamiento envió circulares, también a los establecimientos de los que se tenía constancia de que se encontraban fuera de ordenación, para que procedieran a su adaptación.

A fecha del pasado 5 de octubre de este 2023, se han presentado un total de 103 estudios de aislamiento acústico, "lo cual supone que de los 615 establecimientos de los que el Consistorio no disponía de datos, ahora sí dispone de 512 locales".

De los 103 estudios de aislamiento acústico, han sido valorados 79 y de esos 79 se ha concluido que en 59 el estudio de aislamiento no cumple con el nivel exigido, “pero, sin embargo, no se encuentra en situación de fuera de ordenación”.

En doce de los informes, sí que se cumple con los niveles exigidos y en otros diez casos se ha requerido documentación complementaria puesto que el estudio aportado presenta deficiencia.

Ayudas

Rodríguez también ha recordado que en septiembre de 2022 se presentó una convocatoria pública de subvenciones para la realización de actuaciones de aislamiento acústico en establecimientos de hostelería y ocio nocturno de Vitoria.

Según los datos que dispone su Departamento, se han solicitado un total de 53 subvenciones para la realización del estudio, de las cuales 42 han sido abonadas, una ha sido objeto de renuncia, otra de desestimiento y el resto han sido denegadas por existir deudas.

Plan de conversión

Por su parte, el grupo municipal de EH Bildu, que de esos más de 600 locales, solo haya presentado el estudio una sexta parte de los mismos.

“Así no solucionamos los problemas de ruido que tenemos asociados al ocio nocturno. ¿Qué hacemos con esos más de 500?

Así no solucionamos los problemas de ruido que tenemos asociados al ocio nocturno. ¿Qué hacemos con esos más de 500? Habrá que preocuparse porque no han presentado esos estudios y una cosa es el estudio, y luego la adaptación, que supone un desembolso importante. Por eso es importante que se establezca este plan de conversión que incluye una línea de financiación. El tiempo sigue pasando y queda poco más de un año. Es necesario un impulso y un compromiso por parte del gobierno municipal”, ha insistido su edil Amancay Villalba.

Y eso pasa, a su juicio, por ese plan de conversión, al ser "la herramienta fundamental para resolver problemas de ruidos”.