Los conocidos como Certificados de Depósitos para Acciones (CDA) se comercializaban por parte de Triodos Bank como si se tratara de un producto seguro y rentable.

Además, se aseguraba al cliente que podía rescatar la cantidad invertida sin riesgo alguno.

Sin embargo, eran productos financieros complejos, tal y como acaba de concluir una sentencia pionera en Vitoria, a la que ha tenido acceso DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, puesto que “comparten muchas de las características de las participantes preferentes”.

En consecuencia, condena a Triodos Bank por la comercialización que hizo de los mismos a un cliente, ya que “se transformó en un producto totalmente diferente al inicialmente adquirido”, por lo que no hubiera invertido si se le hubiera informado legalmente

En concreto, al pasar de ser uno que se vendía y adquiría en un mercado interno del entidad, y cuyo precio se fijaba sobre un valor patrimonial contable, fijo y objetivo, a otro que cotizaba en otros mercados, ajenos a la propia entidad emisora, con un precio variable, dependiendo de la oferta y demanda del mercado, lo que provocaba que se redujese sensiblemente el valor del producto, o, incluso, la pérdida de la inversión.

En consecuencia, el auto de la magistrada-juez titular del Juzgado de Primera Instancia 9 de Vitoria, María Jiménez Ramírez, estima íntegramente la demanda de Iribarren Artola Abogados, que solicitaba “la nulidad de las contrataciones por error o vicio en el consentimiento, condenando a Triodos Bank a devolver al cliente el dinero depositado en los CDAs más los intereses legales desde las compras y con expresa condena en costas a dicha entidad”.

Origen del problema

Los CDAS son productos financieros complejos que en un principio emitía su fundación para la administración de las acciones de esta entidad bancaria, por lo que no eran acciones ni se negociaban en bolsa. Por tanto, su rentabilidad dependía de los resultados del banco, de manera que si obtenía beneficios y repartía dividendos, se pagaban a los titulares de los CDA. De lo contrario, no se cobraba.

El problema surgió cuando las condiciones cambiaron, puesto que los CDA pasaron a ser un producto de alto riesgo y, además, Triodos, suspendió el mercado interno que daba liquidez a este producto, de manera que sus clientes se llevaron la desagradable sorpresa de ver cómo estos valores estaban bloqueados y no podían rescatar el dinero invertido.

En este caso, si bien sí se le informaba del riesgo de hacer depender la venta de los CDA con otras órdenes de compra, así como de la imposibilidad de llevar a cabo dicha venta con carácter inmediato, “en ningún caso se le informaba de la concurrencia de una posible falta de liquidez que conllevase el cierre del mercado y la perdida de la inversión, así como que provocase la necesidad de acudir al mercado externo para recuperar parte de la inversión o bien perder la inversión en su totalidad.

"Estamos muy contentos por el cliente afectado"

“Estamos muy contentos por el cliente afectado por CDAs que va a poder recuperar su dinero invertido en este producto tóxico. Con esta sentencia, junto a las anteriores se está produciendo una inclinación en la balanza en favor de los clientes, pues a la fecha son más los juzgados que se han pronunciado condenando a Triodos Bank”, destaca Iñaki Iribarren, abogado de Iribarren Artola Abogados.

Dicho bufete fue el que abrió el camino con la primera sentencia en el Estado favorable por CDAs de Triodos Bank, emitida en julio de 2022 en Navarra, “y poco a poco vamos abriendo la puerta a los afectados en las diferentes comunidades, ya que obtuvimos la primera sentencia en Navarra, País Vasco, Aragón, Comunidad Valenciana y ahora, Castilla y León. Esperamos seguir con este ritmo y finalmente que haya sentencia favorable en todas las comunidades autónomas, pues ayudaremos a nuestros clientes a poder acercar la justicia y que se haga justicia con este producto tóxico”, desean.

Declaraciones del banco

Por parte, desde la entidad bancaria, destacan que Triodos se ha capitalizado durante 40 años a través de los CDA, "una figura extendida en Países Bajos" y que los CDA son un producto de inversión, no de ahorro (Riesgo 6/6) "y así han sido comercializados siempre".

Respecto a la caída del valor o pérdida de la inversión, "en estos momentos los CDAs aún no están cotizando en el nuevo SMN (Sistema Multilateral de Negociación) y su futuro precio vendrá determinado por la oferta y la demanda".

"Este SMN abrirá el libro de órdenes el próximo 28 de junio. En este sentido, la primera ronda de comercialización está planeada para el 5 de julio de 2023, lo que marcará el momento oficial de la cotización de los CDA en el SMN de Captin", detallan.

Aparte, han activado un apartado en su web para que los titulares de CDA encuentren toda la información actualizada de forma cronológica y los pasos que están dando el banco para volver a dotar al activo de liquidez, incluyendo últimas comunicaciones, junta general de accionistas, etc.