Un avance “muy importante” tras “una larga lucha de los colectivos trans”, pero con matices. Así ha acogido la entrada en vigor de la nueva ley Amets Martínez de Heredita, coordinador de Ikusgune, quien advierte de que el Observatorio contra la LGTBI-fobia de Gasteiz estará a partir de ahora “muy vigilante” para que los derechos convertidos ya en norma se implementen de forma efectiva.
Martínez de Heredita ha seguido muy de cerca la tramitación de la norma y, en primera instancia, considera “un paso muy importante” que las personas trans no tengan ya que demostrar “ningún tratamiento, ni diagnóstico ni nada que les reconozca en el género al que pertenecen”. “Que en el registro se reconozca a quienes ya son es un paso muy importante”, celebra.
“Es un paso muy importante que las personas trans no tengan ya que demostrar ningún tratamiento, ni diagnóstico ni nada que les reconozca en el género al que pertenecen”
Además, el coordinador de Ikusgune pone en valor la prohibición expresa de las terapias de conversión, que según asegura han extendido también sus redes en la propia capital alavesa. “En Vitoria-Gasteiz en los últimos años hemos visto en diferentes ocasiones cómo era una realidad que nos tocaba. Y, por tanto, consideramos que es muy positiva esa prohibición”, recuerda.
Martínez de Heredita, de otra parte, pone sobre la mesa la que a su juicio ha sido “la parte más negativa” de la tramitación de esta ley, la “falta de voluntad política” para reconocer a las personas no binarias. Además, el coordinador de Ikusgune alude igualmente a una “cuestión de las infancias” que “también se queda pendiente”.
“Ese es el siguiente reto en el que tenemos que seguir trabajando junto a los movimientos trans: en la incorporación de esos apartados que han quedado fuera para que todas las personas puedan gozar de todos sus derechos”, remarca el coordinador de Ikusgune.
"Esto nos debe servir como aprendizaje. No se pueden hacer leyes sin contar con las personas afectadas, que son las que sufren la transfobia y la violencia”
Antes de ello, Martínez de Heredita aboga ahora por “jugar la segunda parte de esta lucha”, que no es otra que mantener esa vigilancia activa para que “esos derechos que hoy son ley, que han salido del Congreso y del Senado, sean una realidad”. “En ese sentido, los colectivos trans, pero también los observatorios, vamos a estar muy vigilantes para que así sea”, insiste la cabeza visible de Ikusgune.
“Aprendizaje”
Martínez de Heredita critica también que el proceso de participación de las entidades trans en la elaboración del texto legal “no ha sido respetado”, pues el primer borrador que salió del Ministerio de Igualdad con buena parte de las aportaciones del activismo “poco tiene que ver en algunas cosas con lo que hoy es ley”. “Son cosas que se nos han quedado en el tintero y derechos que tendremos que seguir conquistando. Pero esto nos debe servir como aprendizaje. No se pueden hacer leyes sin contar con las personas afectadas, que son las que sufren la transfobia y la violencia”, resume el coordinador de Ikusgune. – C.M.O.
