La cuestionada unidad sindical de la Ertzaintza dio ayer carpetazo sin posibilidad de negociación a la propuesta presentada por el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka. Desunidos en los mensajes lanzados desde la concentración celebrada el jueves frente al Parlamento Vasco –con irrupción de nuevo en el servicio del tranvía de Gasteiz que utilizan cientos de personas–, ayer, sin embargo, volvieron a certificar que siguen al amparo de las reclamaciones nacidas al albur de la plataforma ‘Er-tzainas en lucha’, que lejos de ser ‘asindical’ como sus portavoces se autodenominan, está presente en las mesas de negociación a través de la central Euspel. El cierre de filas se produce en torno a una exigencia imposible de cumplir por parte del Gobierno Vasco como es el aumento lineal de sus salarios, dado que retribución básica de la Ertzaintza está sujeta a lo aprobado para las personas funcionarias en los Presupuestos Generales del Estado. Agotada esta vía, la única opción que tiene Lakua de atender las mejoras en el conjunto de la Ertzaintza pasa por poner el acento en los complementos que reciben. Una oferta que Josu Erkoreka ha materializado en 37 propuestas de distinto corte, con un esfuerzo económico de 18 millones de euros y que ayer fueron despreciadas en apenas treinta minutos de reunión. La actitud mantenida por Erne, Esan, Euspel y Sipe ahonda más un segundo escenario de preocupación porque queda en el aire la incógnita de su implicación en el buen transcurso del Tour de Francia por carreteras vascas. El emblema de ‘Sin convenio no hay Tour’ sigue presente en las pancartas, las declaraciones y las consignas que se lanzan en las concentraciones y movilizaciones. Queda una semana para la que la ronda gala, que colocará a Euskadi en centro mediático internacional en un evento deportivo sin parangón, discurra por Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. El consejero de Seguridad denunciaba tras el fracaso de la reunión la intransigencia de las centrales y la irrealidad de sus propuestas. Pese a ello, tendía de nuevo la mano porque “hay margen de negociación y entendimiento”. Es hora de volver a la senda de la responsabilidad tanto para detener la cada vez mayor incomprensión y lejanía de la sociedad vasca ante la Ertzaintza por la actitud de sus sindicatos, como para cerrar la mejora de un convenio con propuestas que muestran la voluntad real del Gobierno Vasco de atender las reclamaciones de los y las ertzainas.
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