La alianza OPEP+ decidió este sábado aumentar su producción petrolera en julio en 411.000 barriles diarios (bd), con lo que busca revertir antiguos recortes voluntarios pese a presionar a la baja los precios del crudo.
La decisión, adoptada durante una reunión virtual encabezada por Arabia Saudí y Rusia, suma así un tercer incremento consecutivo en esa cantidad, lo que eleva el total restituido en apenas cuatro meses a 1,37 millones de barriles diarios (mbd), más de la mitad de los 2,2 mbd que se busca devolver al mercado.
Además de Rusia y Arabia Saudí, en la reunión participaron ministros de Irak, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Kazajistán, Argelia y Omán, que aplicaron 2,2 mbd en recortes para estabilizar el mercado durante la pandemia de la covid.
El plan original preveía un ritmo lento para recuperar esa producción, a lo largo de un año y medio, con aumentos mensuales de 137.000 bd desde abril, pero esos ocho países dieron la sorpresa al triplicar para mayo y junio ese volumen, una decisión que volvieron a adoptar este sábado. Los ministros justificaron su decisión con una visión optimista sobre la economía mundial a medio plazo.
"En vista de unas perspectivas económicas globales estables y unos fundamentos de mercado saludables, (...) los ocho países participantes aplicarán un ajuste de producción de 411.000 barriles diarios en julio", señala un comunicado de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Sin embargo, según los analistas, en el sector reina una visión más pesimista ante el incierto impacto en la economía mundial de múltiples conflictos, desde la guerra comercial desatada por Estados Unidos con su política arancelaria hasta la situación en Medio Oriente y la invasión rusa de Ucrania, así como el contencioso nuclear iraní.
Así las cosas, los aumentos de la OPEP+ acentúan los temores a un exceso de la oferta y presionan a la baja los 'petroprecios'.
Tras retroceder cerca del 15 % el pasado mes y llegar incluso a perder brevemente la barrera de los 60 dólares, cayendo a su nivel más bajo en cuatro años, el barril de Brent, referente para Europa, terminó el viernes por debajo de los 64 dólares.
La reunión también abordó, según los analistas, los reiterados incumplimientos de las cuotas por parte de algunos miembros como Kazajistán e Irak.
En el comunicado de la reunión se menciona que los ocho países ratificaron "su intención de compensar plenamente cualquier volumen producido en exceso desde enero de 2024". Según algunos analistas, el endurecimiento del ritmo de aumentos responde en parte a un intento saudí de hacer valer su influencia y exigir mayor disciplina interna.