Tubos Reunidos comienza el año con 114 millones de euros menos de deuda a sus espaldas. Así lo ha anunciado la firma alavesa, que ha movilizado para ello 35 millones de caja. Refuerza así su balance de cara a los próximos años y avanza en la ejecución de su plan estratégico, según valoró la compañía.
La tubera con sede en Amurrio ha desplegado dos operaciones paralelas para lograr esta importante reducción de deuda: por un lado ha promovido una subasta entre las entidades financieras titulares de deuda convertible en acciones y, por otro, la compañía ha destinado 7,5 millones de euros a la amortización anticipada de la financiación especial recibida con motivo de la pandemia de covid-19, en parte con garantía ICO.
La firma alavesa ha reducido deuda principalmente mediante una subasta entre las entidades financieras titulares de deuda convertible en acciones, ofreciéndoles la opción de comprarles su deuda convertible a descuento. Esto ha permitido a Tubos Reunidos una reducción de 107 millones de euros de su deuda. La compañía ha destinado a esta operación 27,5 millones de euros de caja.
Cotización: +12,33%
La noticia sobre la reducción de su deuda ha impulsado en la sesión de este viernes las acciones de Tubos Reunidos, que se han revalorizado un 12,33%.
Según informó la compañía, esta operación generará un ingreso financiero de 65 millones de euros y supondrá además un “impacto positivo individualmente considerado por el descuento obtenido en la subasta, la estimación del valor contable de la deuda cancelada a coste amortizado y de los gastos de la operación, lo que se reflejará en las cuentas anuales consolidadas del ejercicio de 2024”.
En 2019, Tubos Reunidos consiguió refinanciar toda su deuda firmando un acuerdo con bancos y bonistas en el que se estructuraron tramos de deuda convertible y bonos convertibles por un importe inicial de 172 millones de euros, ha recordado la tubera alavesa.
Préstamos por la pandemia
Por otra parte, previamente, Tubos Reunidos anticipó y amortizó el pasado diciembre la totalidad de los préstamos que le fueron otorgados en el contexto de la pandemia con garantía ICO, operación cuyo importe ascendió a 7,5 millones de euros.
La compañía logró en 2020 una financiación de 15 millones de euros –parcialmente garantizada a través de ICO– en el marco de las acciones activadas en el contexto de la pandemia, que ahora queda así cancelada íntegramente en el principal, pendiente de 7,5 millones. Además, en 2021 consiguió también apoyo con cargo al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas (FASEE), por importe de 112,8 millones de euros.
Estas dos operaciones para reducir deuda han contado con la autorización “unánime”, ha destacado Tubos Reunidos, de todos los acreedores financieros de la empresa afectados, “lo que supone un fuerte respaldo a la compañía y a su equipo directivo”.
“Esta operación supone un paso más en la estabilidad de la compañía y en el cumplimiento de su plan estratégico”, ha apuntado el director general de Tubos Reunidos, Carlos López de las Heras.
“Desde el pasado mes de octubre tenemos funcionando la nueva acería del grupo y prácticamente completada la reorganización industrial de la compañía, avanzando de forma significativa en la competitividad de la misma. La reducción de la deuda financiera es otro paso importante en la estabilidad y recuperación de la compañía”, ha concluido.
Tubos Reunidos obtuvo un beneficio neto de 54,5 millones durante el primer semestre de 2023 –52 millones más que en el mismo periodo del año anterior– y cerró el año con una revalorización en bolsa del 160% en bolsa.
