La compañía familiar alavesa Lascaray-LEA, popular por sus útiles de afeitar, la más antigua del País Vasco y una de las industrias más longevas de España, celebra este jueves día 26 su 200 aniversario.

Lascaray S.A. se fundó en 1823. Fue Juan Bernardo Lascaray quien, procedente de Ciboure (Francia), llegó a Vitoria para arrendar una pequeña fábrica de velas de sebo en el barrio de El Prado para dedicarse a la fabricación de estos productos.

Con la segunda generación, comandada por Casimiro Lascaray, se puso en marcha en 1847 una nueva factoría, esta vez bajo la denominación de La Estrella Alavesa (LEA), donde se fabricaba jabón de oleína, adentrándose entonces la compañía en el mundo de la jabonería y los detergentes. De esta época data la creación del popular jabón de Marfil.

En 1973 se trasladaron a la actual sede en el polígono industrial de Arriaga, en Vitoria. Actualmente centra su actividad en dos líneas de negocio: la división Cosmética y la división Oleoquímica.

La división Cosmética representa en estos momentos en torno a un 45 % de la facturación. Lo más popular son las cuchillas de afeitar, de las que la firma alavesa vende cada año de 15 millones de unidades, más espumas para el afeitado o desodorantes.

Oleoquímica

Lascaray fabrica bajo marca propia (LEA) pero también elabora producto para otras enseñas del sector de la distribución y las grandes superficies.

La división de Oleoquímica se centra en los ácidos grasos, que se utilizan, entre otros, en detergentes, suavizantes o neumáticos. Todos los detergentes que se fabrican en España y en varios países de Europa, por ejemplo, cuentan con ácidos grasos que tienen su origen en la fábrica de esta compañía.

Con capital 100 % alavés, sigue en manos de la misma familia: el presidente es Félix Lascaray Zugaza, de la quinta generación, y el consejero delegado Félix Lascaray Palacios, de la sexta generación.

Actualmente exporta el 30 % de sus ventas, sobre todo al mercado latinoamericano, y su plantilla asciende a 95 personas.