Pedro Garaygordobil, distinguido como empresario vasco del año

BILBAO - El máximo responsable de la compañía de construcción naval Astilleros Zamakona, Pedro Garaygordobil, ha sido elegido Empresario Vasco del Año, en el transcurso de la XXVII edición de La Noche de la Empresa Vasca, organizada por la Fundación Empresa Vasca y Sociedad con el patrocinio del Kutxabank y la colaboración de Inbisa y Dinof.

El responsable de uno de los astilleros privados vascos más importantes ha sido distinguido por la notable trayectoria empresarial que atesora por un jurado presidido por Jesús Alberdi y que también destacó en la presente edición el trabajo que realiza la compañía vizcaina Ingemat, ingeniería especializada en la automatización y robótica para el sector de automoción, con el premio Made in Euskadi; y de la firma guipuzcoana Plastigaur, fabricante de film plástico para embalaje, con el galardón Innovación Empresarial. Por último, la Euskal Makila, se entregó a la empresa Voith Paper en Tolosa, que ha celebrado el centenario de su constitución y los 50 años de su integración en Voith.

Las distinciones fueron entregadas por los ganadores de la edición anterior del galardón. Así , Javier Roquero, de Salto Systems, fue el encargado de entregar a Pedro Garaygordobil la distinción de Mejor Empresario Vasco del año. Víctor Picó, presidente de Ingemat, recibió el premio Made in Euskadi de manos de Alex Belaustegi, consejero delegado de Indar; y, por último, el director general de Plastigaur, Luis Artola, galardonadopor la Innovación Empresarial recibió la distinción del consejo de RPK, Aitor Lasagabaster. El consejero vasco de Hacienda, Pedro Azpiazu, entregó la Euskal Makila a Voith Paper, que estuvo representada por su director general, Marcos García de la Torre .

Hablar del presidente de Astilleros Zamakona, Pedro Garaygordobil (Zierbena 1940), es hablar de un empresario a la antigua usanza, un hombre hecho a sí mismo que empezó a trabajar con 14 años en una empresa consignataria de buques y hoy, más de 60 años después, dirige el Grupo Zamakona Yards, que en sus astilleros del País Vasco y Canarias emplea a unos mil trabajadores, entre el personal directo y las contratas habituales del sector naval, y que factura de media anual unos 150 millones de euros.

Pedro Garaygordobil, una persona sin pelos en la lengua, es autodidacta, pero tiene un amor al trabajo inquebrantable y sigue al pié del astillero en Santurtzi del que en 1965, con sólo 25 años, fue nombrado director gerente. En 1970 no dudó en irse a Venezuela a montar un astillero para una multinacional estadounidense en Maracaibo para posteriormente montar en las Islas Canarias, la empresa de reparación Napesca. En 1978 vuelve a Euskadi y asume el riesgo de reflotar Astilleros Zamakona, fundado en 1914, empresa que realizó con éxito gracias, entre otras medidas, a ser “el haber sido de los primeros en apostar por el mercado exterior, aprovechar en su momento el tirón del petróleo y, sobre todo, crear un fuerte equipo comercial”.