berlín. La canciller alemana, Angela Merkel, pronosticó ayer que Europa necesitará al menos diez años más para superar la crisis de la deuda en la que está sumida desde 2008. En su tradicional videomensaje de los sábados, la dirigente germana señaló que la deuda se ha ido acumulando durante décadas, lo que significa que "no dejará de existir de un día para otro".
"Probablemente haga falta una década para que estemos mejor", señaló a continuación. Según la canciller, "casi todos los grandes países europeos han gastado durante años mucho más de lo que han ingresado".
En ese sentido, la jefa del Ejecutivo germano aludió a la normativa constitucional que prohíbe asumir nuevos créditos por encima de un limite estipulado y subrayó que "por eso también es tan importante que Alemania cuente con un freno a la deuda".
"Por eso hemos decidido ahora que todos los países de la eurozona se impongan un freno a la deuda similar", dijo. No obstante, Merkel señaló que no hay motivos para el pesimismo en lo que se refiere al desarrollo económico, aunque subrayó que "si a Europa no le va bien a Alemania tampoco le irá bien".
culpa al euro Por ello hay que hacer todo lo posible "por poner en orden las cosas en Europa", agregó. "Tenemos todavía mucho trabajo, eso tengo que decirlo", subrayó antes de añadir que todos los países tiene que esforzarse y hacer los deberes. Se trata de "un camino arduo" en el que hay que avanzar paso a paso.
"Es una gran tarea que tenemos que cumplir de cara al futuro y sobre todo para las nuevas generaciones", dijo la canciller.
cameron El primer ministro británico, David Cameron, ha culpado a la crisis del euro del empeoramiento de la economía británica y ha exhortado al Eurogrupo a acordar de forma definitiva un paquete de rescate. "La economía británica esta yendo a peor conforme la crisis del euro no se resuelve", afirma Cameron. Esta crisis está causando un "efecto escalofriante" en la economía de Reino Unido y "cada día que (la crisis de la eurozona) permanece sin resolver, es un día malo para nuestras perspectivas económicas", añade. "El mundo ha mostrado que está listo para actuar, pero no pretendo que todos los problemas de la zona euro sean atajados". Como consecuencia, la comunidad internacional tendrá que lidiar con "retos profundos", entre los que se encuentra el estancamiento de Reino Unido que podría llevar una vuelta a la recesión económica.