La Giroa Veolia Vitoria Night Run ha celebrado este sábado su primera edición con un notable éxito de participación, ambiente y respuesta del público. Un total de 1.200 dorsales se agotaron meses antes del evento, además de los cientos de participantes que buscaban dorsal en la lista de espera, consiguiendo así una de las propuestas deportivas más innovadoras y esperadas del calendario local.
Con salida y meta en la céntrica Calle de los Fueros, junto a las oficinas de Kutxabank, el recorrido nocturno de 5K y 10K iluminó las calles del centro de Vitoria con neones, música y animación, creando un ambiente único donde correr se convirtió en una auténtica experiencia única.
El evento, que ha fusionado running y espectáculo, ha destacado también por su puesta en escena, la acogida del público y la implicación de los participantes.
Un concepto diferente que ha llegado para quedarse
Desde su planteamiento, la Giroa Veolia Vitoria Night Run se propuso ofrecer algo más que una carrera: un evento urbano, festivo, inclusivo y con una marcada identidad visual.
La respuesta no ha podido ser mejor: corredores bailando, ambientación musical, pulseras luminosas, DJ en directo y dos ambientes Post-Meta en el Centro Comercial Dendaraba y la sala Kubik, con música para que los y las participantes pudieran celebrar por todo lo alto su reto completado.
La entrega de premios se celebró en el mismo espacio del Neon Village en Dendaraba, rodeada de luces, música y aplausos, en un ambiente festivo inédito hasta ahora en este tipo de eventos en la ciudad.
Los ganadores en categoría masculina fueron Aitor Errarte en 5 km. y Luis Alberto Pérez en 10 km., mientras que entre las féminas reinaron Sara Abecia y Fernanda Fleischmann respectivamente.
