- El inicio del Tour ha sido de lo más inesperado. Una primera semana repleta de accidentes, protestas y manifestaciones ha dado paso a la primera jornada de alivio. El pelotón descansó ayer en los Alpes tras un agitado y exigente inicio de carrera. Con una amplia ventaja en la clasificación general, Tadej Pogacar ha podido dormir tranquilo. El esloveno va a la caza del doblete en París, aunque él mismo afirma que todavía no hay nada decidido. El debate está a la orden del día. ¿Sucumbirá Pogacar?
Desbancar al líder del UAE se antoja complicado para sus contrincantes. El esloveno parece tener todo a su favor para hacerse con el maillot amarillo. Tras solo una semana de competición su rival más próximo es el australiano Ben O'Connor. El que fuera ganador en Tignes, se aleja a 2:10 del líder. El tercer puesto es para Rigoberto Urán. El colombiano cuenta con una diferencia de 5:18. Le siguen, con la misma marca, Jonas Vingegaard, Richard Carapaz y Enric Mas. El vasco más adelantado es Pello Bilbao. El corredor del Bahrain es undécimo, a 8:38 del líder, y está dispuesto a colarse en el Top 10.
Todas las previsiones del Tour se redujeron a cenizas rápidamente. Dos de los equipos más potentes han sufrido percances y aún no se han mostrado. El Jumbo Visma perdió a Primoz Roglic tras sufrir una caída en la tercera etapa, donde el esloveno se vio envuelto en un estrepitoso accidente y posteriormente se vio obligado a retirarse. En el mismo contratiempo se vieron involucrados Geraint Thomas, Richie Porte y Tao Geoghegan, quienes quedaron afectados en las filas del Ineos.
El pelotón volverá hoy a dar pedales en una etapa entre Albertville y Valence, 190 kilómetros que permitirán a los esprinters volver a escena. El plato fuerte más próximo será el miércoles, con la doble ascensión al Mont Ventoux, que no albergará la meta de la etapa. La jornada comenzará en Sorgues y culminará, por primera vez desde 1994, en Malaucène. Este monte vuelve al Tour cinco años después de que Chris Froome tuviera que correr con su bicicleta en la mano tras romperse al colisionar con una moto. Se trata de una temida etapa por los corredores, que se pondrán a prueba con 21 kilómetros de sinuoso ascenso con un 5% de desnivel. Los favoritos tendrán que dar lo mejor de sí para superar una de las etapas más duras de esta edición. Será una jornada clave que dará paso a las etapas por los Pirineos hasta finalizar el Tour con la habitual crono antes de concluir la competición en París. Mientras tanto, el debate estará servido. ¿Desfallecerá Pogacar?