El calendario no da tregua y el Baskonia afronta otra semana dura con un viaje a Alemania, un partido en casa ante el CSKA y otro desplazamiento a Málaga. Pero la cosa no se queda ahí. El calendario depara una cuesta de enero terrible con una docena de partidos en el primer mes del año del que ya se ha disputado uno, victoria ante el Andorra el sábado en el Buesa Arena.
Las cosas no han empezado mal para los baskonistas pero quedan todavía once etapas en el denso maratón programado desde mañana martes hasta el próximo domingo 31 de enero. Una vez confirmada la presencia vitoriana en la fase final de la Copa del Rey, el principal objetivo de este mes debe ser consolidarse entre los ocho primeros en la Euroliga.
El primer escalón a subir se encuentra en Berlín, mañana mismo, para recuperar el partido aplazado en su día ante el por ahora fallido proyecto de Aíto García Reneses. El veterano entrenador ya ha perdido diez partidos y debería ser un rival accesible para los vitorianos. Luego llegan el CSKA, Fenerbahce, Maccabi, de nuevo Alba, Asvel, Zalgiris... La escalera se empina sobremanera con la dificultad añadida de la Liga ACB.
