aídas, lesiones, retiradas inesperadas y el dominio en la carretera de Roglic y el Jumbo Visma sobre el Ineos de Egan Bernal han marcado el Dauphiné que finalizó con el triunfo del colombiano Daniel Martínez. A dos semanas del Tour, el ciclismo anuncia posibles cambios en relación a la dinámica habitual de las últimas temporadas.

¿Se acabó el dominio aplastante del Ineos (exSky) en el Tour?, ¿Tomará el poder el esloveno Primoz Roglic?, ¿Preocupa el futuro inmediato del ciclismo español teniendo en cuenta el papel de los ciclistas nacionales en el Dauphiné?

Son algunas de las interrogantes que se desprenden de un fin de semana marcado por el Dauphiné e Il Lombardía, donde un grave accidente acabó la temporada de la nueva estrella del ciclismo mundial, el belga Remco Evenepoel.

Cinco son los puntos de análisis que se desprenden antes de la salida del Tour el próximo día 29 en Niza.

Si Il Lombardía eliminó a Evenepoel, que iba a debutar en el Giro de Italia con honores, el Dauphiné presenció las retiradas de sus principales favoritos. Egan Bernal antes de la cuarta etapa aquejado de dolores de espalda, Roglic, líder y dominador, magullado por una caída no salió en la quinta para no arriesgar.

Ambos quedan entre algodones para llegar a Niza en las mejores condiciones. Otros nombres destacados, como el alemán Emanuel Bauchmann o el holandés Steven Kruijswijk, cuarto y tercero en el Tour 2019, también probaron el asfalto y son duda para la carrera francesa.

Las lesiones y molestias súbitas también afectaron a hombres que aspiran al podio en la “Grande Boucle”, Nairo Quintana no acabó el Dauphiné por dolores en la rodilla derivados del atropello que sufrió el pasado mes de julio en Colombia. El español Mikel Landa se hundió en los puertos de la dura última etapa. Perdió cerca de 20 minutos. La espalda y los calambres mermaron al alavés.

Primoz Roglic, de 30 años, ganador de la Vuelta 2019, acaba de demostrar en el Dauphiné una superioridad que le permite ser favorito al Tour, su gran objetivo. Su estado de forma incluso se considera excesivo teniendo en cuenta que la hora de a verdad del Tour llegará en la última semana.

Sólo una caída le apartó de un triunfo que era suyo. A Bernal, de 23 años, le ha salido un rival de quilates, y ambos están llamados a protagonizar el duelo con mayúsculas en el Tour.

Además, el Dauphiné ha puesto en escena el poderío enorme del Jumbo, con ciclistas contrastados que han funcionado en bloque al servicio de su líder hasta la misma meta. Un dominio aplastante, como el del Ineos en las últimas temporadas.

Por contra, a escuadra británica ha desempeñado el papel secundario al que le ha relegado el Jumbo. Ni Geraint Thomas ni Chris Froome han actuado al nivel de sus respectivos historiales. Su líder Egan Bernal fue cediendo tiempo ante Roglic día a día hasta que decidió retirarse. Solo el joven ruso Pavel Sivakov ha destacado luchando contra los elementos.

A pesar de su abandono, Bernal es el líder indiscutible del Ineos, de manera que el debate al respecto queda cerrado. Tras imponerse en Occitania y ser segundo tras Roglic en el Tour de L’Ain, el ganador del Tour debía confirmar los galones con un puesto destacado, pero su lesión obligó al equipo a guardar su joya entre algodones.

Las cifras cantan. El primer Ineos de la general fue Sivakov, el undécimo a 3.10 minutos. Geraint Thomas, nunca se fajó entre los favoritos, acabó en el 37º a 53.38, mientras que Froome se fue al 71 a casi hora y media.

Ahora, el equipo británico deberá decidir si incluye o no a Froome en la formación del Tour. El corredor, a quien se le vio repartiendo bidones a sus compañeros como buen gregario, no se encuentra a un nivel físico top para la carrera estrella, aunque su experiencia y carisma podría ser tenida en cuenta.

Si Froome se disolvió en el Dauphiné, el neerlandés Tom Dumoulin, ganador del Giro 2017 y segundo en el Tour 2018, regresó a su mejor nivel después de más de contratiempos.

Con el maillot del Jumbo terminó séptimo en Dauphiné después de cinco etapas exigentes de montaña, aportando trabajo al equipo hasta los últimos kilómetros y con sensaciones que le recuerdan a sus mejores años de 2018. En el Tour puede ser vital para Roglic en su combate por el título.

Otra alegría para el equipo holandés ha sido la confirmación del estadounidense Sepp Kuus, un escalador de postín de los que aguantan hasta la meta al servicio del líder, e incluso capaz de ganar etapas, como demostró el domingo en Megéve.

La caída de Kruijswijk pone en duda al holandés para el Tour. Tercero el año pasado, sería otra pieza importante para un Jumbo, que al completo, será la pesadilla del Ineos.

El Dauphiné marca el resultado del trabajo hecho hasta el momento y el futuro inmediato antes del Tour. Quitando el éxito secundario del jersey de la montaña de David de la Cruz, los líderes del ciclismo español han dejado motivos para la preocupación.

Alejandro Valverde, a sus 40 años, volvió a ser el mejor de los españoles. Excepto en la primera etapa, cuarto, el murciano no volvió a disputar entre los mejores. Siempre combativo cumplió en la quinta y durísima jornada para escalar al duodécimo lugar a 7.59 minutos del ganador.

Enric Mas tampoco dio sensación de estar en disposición de pelear con la alta jerarquía del pelotón. Al final cerró el top 20 a 22.23 minutos.

Y Mikel Landa, quien salió tercero de la general en la última tras la retirada de Roglic, y con opciones incluso de llevarse el Dauphiné, se hundió en los primeros puertos y se le encuentra en la decimoctava plaza a 18.58. Un batacazo, al parecer, debido a calambres y dolores de espalda.

Restan dos semanas para el Tour si la pandemia sanitaria no lo impide. En una temporada extraña los pronóstico son más complicados, pero parece evidente que Roglic va a tratar de tú a Bernal y su equipo mirará de frente al Ineos. Respecto a los españoles, Landa, Mas y Valverde serán las referencias. A pesar de todo.

Tour de Francia. El Movistar ha concentrado en los Alpes a diez ciclistas que forman el bloque del que saldrá la selección definitiva para disputar el Tour, que comenzará el 29 de agosto. “La escuadra reconocerá algunas etapas de la ronda francesa y se desplazará a Niza días antes del inicio. El conjunto pretende así preservar el bloque desde el punto de vista sanitario y llegar al Tour con las máximas garantías posibles”, explicó el equipo. La alineación de la concentración está formada por Alejandro Valverde, Enric Mas, Marc Soler, Dario Cataldo, Imanol Erviti, Nelson Oliveira, Antonio Pedrero, Jürgen Roelandts, José Joaquín Rojas y Carlos Verona.

El Dauphiné ha puesto en escena el poderío enorme del Jumbo. Un dominio aplastante, como el del Ineos en las últimas temporadas