Llega la gran despedida del Aitzina Folk de 2025 y el festival solidario ha preparado un domingo muy especial en Mendizorroza. Al mediodía, Titiriteros de Binéfar harán de las suyas junto al público familiar. A partir de las 20.00 horas, en el polideportivo se unirán los genios de Fetén Fetén y de un Xabi Aburruzaga que hará en la capital alavesa la gran presentación oficial en directo de su nuevo disco, Bask.

“Somos muy conscientes de dónde vamos a tocar. Sabemos lo que es la ataxia telangiectasia, qué significa esta enfermedad rara y lo que hace el Aitzina para ayudar” a la investigación, apunta el trikitilari. “El reto este domingo es doble. Por una parte, vamos a presentar nuestro disco nuevo. Es la primera vez que lo vamos a tocar en directo. Y, por otro, queremos estar a la altura de este festival, que se está convirtiendo en un referente también fuera de Euskadi”.

“En el concierto del Aitzina, sobre el escenario vamos a contar con más de cien colaboradores entre dantzaris y músicos”

Además, este estreno va a contar con no pocos invitados. Aburruzaga estuvo hace pocos días en Gasteiz, en el encuentro de escuelas de música que organiza cada año el Aitzina. Así, junto a sus músicos estarán también trikitilaris, violinistas, dantzaris... “Vamos a tener más de cien colaboradores con nosotros encima del escenario. Va a ser muy especial porque lo planteamos también como una forma de abrir la puerta a los futuros creadores, a los músicos que tocarán en los Aitzina del futuro”.

En este sentido, el músico remarca que es muy necesario “alimentar” a los talentos del futuro. “Si cuidamos a esta juventud, estamos cuidado al público del mañana; y dentro de él también están quienes en el futuro tocarán la triki, el pandero, la gaita... Es muy importante darle continuidad a todo eso”, y más todavía hacerlo en “un festival como el Aitzina, que es como una gran familia”.

Nuevo trabajo

Así que muy bien acompañado, Aburruzaga recorrerá los 13 temas que dan vida a Bask, un trabajo que se publicó hace justo un mes tras dos años de intenso trabajo. “La acogida está siendo muy buena. De hecho, en la Azoka de Durango las ventas han sido muy buenas, mejores de las previstas. Y en plataformas hemos multiplicado por seis la audiencia”.

Eso a pesar de que el músico reconoce que este trabajo tenía su aquel. “Nuestro anterior disco de estudio, Bost, nos dio muchas alegrías” en forma, por ejemplo, de premios como el de Musika Bulegoa, pero también de conciertos en Estados Unidos, Japón, Dinamarca, Portugal, Quebec... “Nos abrió muchas puertas” y ahora, con Bask tenía ese miedo, una vez que decidí saltar a la piscina, de ver si quedaba algo de agua o si nos íbamos a pegar un buen golpe”. 

“Con ‘Bask’ hemos hecho un disco muy actual, con temas donde hay mucha música de diferentes estilos; la acogida está siendo muy buena”

El resultado final es “un disco muy actual, con temas donde hay mucha música de diferentes estilos”. Así “están presentes Brasil, Argentina, África... hay guiños a diferentes sitios. Me gusta hacer ese tipo de mestizaje, de fusión, o llamémoslo como queramos, pero siempre partiendo de un ritmo de aquí”. En todo ello se ha estado trabajando sin pausa pero sin prisa, dándole a esta producción el tiempo que necesitaba. Se ha hecho “a fuego lento” desde el propio estudio de Aburruzaga, lo que también permite hacer el camino de otra manera. 

Más allá de que “la acogida está siendo muy buena”, el músico recuerda algo que ya comentó en la presentación del disco ante los medios de comunicación. “Mis compañeros se rieron, pero es verdad: seguro que este disco se puede hacer mejor, que si lo hace alguien con más conocimientos que yo o con más trayectoria, hubiera sido mejor. Pero yo, personalmente, no puedo. Bask es mi diez, no puedo hacerlo mejor, no tengo más. Me he vaciado por completo”.

'Bask' de Xabi Aburruzaga

'Bask' de Xabi Aburruzaga Cedida

Un cuarto de siglo

En esta línea, apunta que “lo hemos dado todo en todos los procesos”, incluso llevando por primera vez a masterizar a Berlín para encontrar “un sonido exquisito”. Por eso también ha querido hacer un lanzamiento especial en vinilo. “Hay mucha gente que dice que es un formato que ha vuelto y puede que sea así en el rock, pero en el folk o en otras músicas minoritarias, no lo tengo tan claro. Aún así, en Durango vendimos muchos más de los que pensábamos”. 

Al fin y al cabo, la música y sus modelos de distribución han cambiado mucho con respecto, por ejemplo, a cuando Aburruzaga empezó a dar sus primeros pasos en el sector. De eso se van a cumplir 25 años dentro de no tanto. Cuando llegó a los 20, por cierto, realizó su primer álbum grabado en directo, Aurrez aurre. “La verdad es que se me ha pasado el tiempo muy rápido. He sido tan feliz por el camino en sí que parece que empecé la semana pasada”, sonríe.

“La verdad es que han pasado 25 años y seguimos con la misma ilusión, la misma incertidumbre, las mismas ganas de crear, de seguir aprendiendo. La carrera de músico, por suerte, se puede alargar muchos años”, tiempo en el que seguir “siendo muy feliz y disfrutar de todo el proceso”