A pesar de la pandemia y de las restricciones del momento, fue en septiembre de 2021 cuando Lauren Henderson acudió por primera vez a la capital alavesa. La cantante norteamericana y el público del Dazz conectaron al momento, más allá de las medidas de seguridad, separaciones... Por fortuna, unos meses después, en mayo de 2022, todo estaba bastante más tranquilo y la intérprete regresó al escenario de la calle Cuchillería, que se quedó sin entradas. Desde entonces han pasado muchas cosas, publicación de nuevos trabajos incluida, así que es el momento de que Gasteiz y la artista se reencuentren. Eso va a pasar este mismo jueves.

En concreto, esta tercera cita se va a producir en el espacio del Casco Viejo a partir de las 20.00 horas. Como en las dos ocasiones anteriores, junto a la cantante se encontrará el baterista italiano Elio Coppola, quien también ha sido parte de la programación del Dazz con varios proyectos en los últimos años. Esta vez, completarán el cuarteto Luismi Segurado al piano y Alex Gilson al contrabajo.

“Un club fantástico”

“¡Es un placer volver a Dazz!”, apunta la intérprete. “Los ambientes íntimos son maravillosos para el jazz y la música que compartimos. Es hermoso mirar a los ojos del público y crear música en un ambiente tan hermoso y cálido”, como pasa en las tablas de Cuchillería, donde músicos y espectadores se encuentran a escasos milímetros. “Dazz es un club fantástico y único. Siempre es un placer tocar en un ambiente tan comunitario”, subraya la artista norteamericana.

Lauren Henderson Dasha Dare

De madre panameña y padre afroamericano, la norteamericana se nutre de diferentes tradiciones y culturas para construir un sonido propio y único que, en los últimos años, se ha traducido en la publicación de trabajos como La Bruja y Conjuring. El más reciente es Sombras, que tendrá su peso específico en el concierto de la capital alavesa. “Compartiré algunas canciones de este último álbum pero también música de los diversos discos que he grabado a lo largo de los años”, apunta la intérprete, quien desde hace ya varios años reside en Nueva York, aunque sus actuaciones en otros países son más que habituales. 

El lenguaje universal

De hecho, a Gasteiz llega tras tocar en tierras italianas, para después seguir por Barcelona y ofrecer varias actuaciones en Alemania. Tras volver a encontrarse con el público norteamericano, la cantante seguirá este año a este lado del Atlántico con conciertos en escenarios de Bélgica y Suecia, por ejemplo. Son momentos de encontrarse con personas de muy distintos lugares y hacerlo a través del lenguaje universal de la música.

“Cada público es único, incluso al regresar a los escenarios en los que ya has estado. El espectáculo es una experiencia colectiva. El público juega un papel fundamental en el desarrollo y la esencia de cada repertorio musical. Disfruto de las giras, de visitar nuevos lugares y de volver a los escenarios que me encantan, como el Dazz. A veces, toco en países en los que no hablo el idioma; sin embargo, mi objetivo es transmitir el mensaje de la música y espero que el público sienta la emoción que buscamos transmitir”.

Así va a pasar en Vitoria, donde volverá a estar junto a un Coppola que siempre habla maravillas de ella. “Elio es un músico dinámico que toca con el corazón. Es el único miembro de la banda que ha tocado conmigo en todos los conciertos del Dazz. Tenemos una gran amistad y una gran conexión musical”, afirma la intérprete. Eso lo va a volver a comprobar quien se acerque este jueves al concierto.