“Este no es un espacio para rellenar horas muertas ni una actividad más en la agenda. Es un territorio donde la creatividad se entrena, donde la técnica se afila y donde cada persona descubre su propio lenguaje artístico”. Sobre esta base nace esta semana en la capital alavesa el proyecto Imaginarium Lab. La propuesta, que se impulsa desde Zas Kultur, tiene un objetivo “claro”: buscar y apoyar el talento joven.
El primer paso se va a dar este viernes. La intención, como expresan desde la plaza San Antón, no es abrir “un simple taller donde los más jóvenes pasen el tiempo; es un espacio vivo, un laboratorio de descubrimiento donde buscamos algo más profundo: el talento joven”.
Así, “cada participante no será un espectador, sino un explorador activo. No estamos aquí para llenar horas vacías. Estamos aquí para encender chispas”. Es, por tanto, “un campo de pruebas para desarrollar pensamiento crítico, experimentar con nuevas herramientas y aprender a traducir ideas en formas visuales y materiales”.
¿A quién se dirige?
La propuesta está pensada para personas de entre 10 y 17 años. Las sesiones se van a producir los viernes –de 19.00 a 21.00 horas en euskera– y los sábados –de 12.00 a 14.00 horas en castellano–, siendo el acceso gratuito. Eso sí, las plazas son limitadas a diez personas en cada ocasión, así que es necesario inscribirse de manera previa.
“El arte es una de las herramientas más poderosas para que un joven descubra de qué es capaz”, apuntan desde el proyecto
Este paso se tiene que hacer a través del correo electrónico espaciozas@gmail.com. A partir de ahí, “lo que ofrecemos es una oportunidad para aprender, crecer y descubrir”, dicen desde Zas. Se impulsa así un “espacio diseñado para jóvenes” con la misión “de conectar su creatividad con las herramientas, técnicas y experiencias necesarias para desarrollarla. Pero más allá de eso, es un lugar donde podrán experimentar, arriesgarse y expresarse de formas que quizás nunca habían imaginado”.
Eso sí, se avisa que este “no es un taller de manualidades ni de actividades pasivas”, sino que quienes acudan “trabajarán con herramientas como impresoras láser, escáneres, programas de edición, papeles de texturas únicas y materiales vibrantes. Desde el diseño digital hasta la creación de collages y proyectos audiovisuales, explorarán técnicas que no solo les permiten expresarse, sino también pensar y resolver problemas de forma creativa”. Se hará de esta forma contando con “artistas-educadores que les guiarán no como instructores, sino como mentores en su viaje creativo”.
La importancia del arte
Como subrayan desde Zas, “desarrollar la creatividad no es solo una actividad artística; es una forma de construir pensamiento crítico, trabajar en equipo, ganar confianza y descubrir cómo transformar una idea en algo tangible”. Por ello, “Imaginarium Lab no busca talentos porque crea que todos deben ser artistas; lo hace porque el arte es una de las herramientas más poderosas para que un joven descubra de qué es capaz”.
Puesto que el arte “es exploración, aprendizaje y crecimiento” nace esta aventura a largo plazo, “un lugar para jóvenes exploradores dispuestos a aventurarse en este viaje”.