La cuadragésimo novena edición del Festival Internacional de Teatro de Vitoria sigue caminando con firmeza y con el apoyo del público, ya que, tras el cierre por obras del Principal, casi todas las citas con el público se están traduciendo en aforos llenos. Va a pasar así también este jueves de la mano de Ékoma Teatro, que llega al Jesús Ibáñez de Matauco (centro cívico Hegoalde) para estrenar Lohi gorria, adaptación al euskera de la premiada Barro rojo. Quien no tenga ya su entrada en la mano, debe darse prisa porque quedan muy pocas disponibles. La ocasión, por supuesto, lo merece.

En concreto, será a partir de las 19.30 horas cuando se pueda compartir este montaje del grupo alavés impulsado por Aitor Pérez Collado, encargado de dar vida al texto creado por Javier Liñera –encargado también de la dirección–, unas palabras a las que, para la ocasión, da nueva vida el trabajo de Idoia Barrondo a la traducción. “No puede ser literal. Es imposible. Es una adaptación en la que hemos cuidado mucho el idioma, su poética y características”, apunta el actor.

Emocionar y pensar

Sobre estas bases, y más allá de que se han actualizado también algunas cuestiones estéticas, la idea del montaje se sigue manteniendo, es decir, buscar en el público la emoción y la reflexión, “que la gente se vaya a casa dándole vueltas a la cabeza”, dice con una sonrisa Pérez Collado. Así lo van a poder comprobar quienes acudan a Hegoalde. Cabe recordar que la versión en castellano sí se pudo ver en su momento en tierras alavesas, pero no en Gasteiz.

Cartel de la obra

Así, se presenta una pieza que es, como describe Pérez Collado, “un viaje” por la propia vida del protagonista, aunque sin perder de vista las vivencias y el recuerdo de su tío. “Es una historia dentro de otra historia. Un viaje entre dos personajes y sus vivencias, entre el llanto y la sonrisa, entre la rabia y la reconciliación, entre el cabaret y el drama, entre el miedo y la alegría, entre lo cruel y el amor”. Es, en definitiva, “la historia de un hombre que, por ser gay, fue recluido primero en un campo de concentración en la Europa de Hitler y después en la cárcel de la España de Franco”. 

Ese pasado es relatado desde el hoy por su sobrino, por la transformista Amelia, quien también trae la obra y las realidades de las que habla al hoy. Se establece así un juego escénico en el que hablar de emociones, de la memoria histórica, de la sociedad en su conjunto, de la intimidad, de... De esta forma, la creación de Ékoma Teatro –después de visitar además diferentes países en su versión en castellano– cobra ahora una nueva vida. Lo hace comenzando su camino este jueves 21 en el Ibáñez de Matauco.