Este sábado ha tenido lugar el acto de inauguración de la nueva ubicación de la escultura Araba de Nestor Basterretxea que permaneció desaparecida durante más de veinte años. En el acto de colocación ha participado Txelo Auzmendi, alcaldesa de Asparrena y su equipo de gobierno, quien se acordó especialmente de Nestor Basterretxea a quien quiso decirle que “al final ha aparecido porque tenía una espinita clavada cuando desapareció de la cima del Aratz- Será que tenía que aparecer Araba”.

Tras ser hallada a finales de mayo de 2021, después de más de dos décadas de su desaparición, se ha restaurado y se ha colocado en la confluencia de la calle Santsaerreka con Ilarduibide de Araia.

Se trata de un punto estratégico de la localidad, lugar de paso obligado para todo aquel que acceda a la localidad y a sus diferentes instalaciones y además ubicado en un punto desde el que se puede ver la cima del Aratz, lugar de su primera ubicación y del que desapareció de forma inexplicable. “De esta forma, además de poder ser disfrutada por vecinas, vecinos y visitantes, Araba seguirá conectada con la montaña que le dio su primer asiento”, explicó la alcaldesa de Asparrena, Txelo Auzmendi.

Gorka Basterretxea, hijo del escultor, leyó un bonito texto E.S.P.

Centenario de Basterretxea

La inauguración coincide con los actos del centenario del nacimiento de Néstor Basterretxea que se celebran durante este 2024, uno de los artistas más influyentes de Euskadi, conocido por su estilo moderno y su enfoque en temas de identidad vasca.

Al acto de inauguración de Araia acudieron tanto la familia del escultor vasco, las autoridades municipales, y personas que de una forma u otra han participado en el periplo del misterioso viaje de esta obra del artista de Bermeo. La escultura fue instalada en la cima del monte Aratz hace 25 años.

“Un día Araba desapareció y se convirtió en una tonelada a la deriva, en una ilusión en el abismo. Durante mucho tiempo fue la víctima impotente de un destino inesperado"

Gorka Basterretxea

Gorka Basterretxea, hijo del escultor, leyó un bonito texto en el que señaló que “un día Araba desapareció y se convirtió en una tonelada a la deriva, en una ilusión en el abismo. Durante mucho tiempo fue la víctima impotente de un destino inesperado y cada noche se lamentaba y lloraba desesperaba porque no podía cumplir la tarea que tenía encomendada. Una tarde de invierno fue encontraba por unos montañeros que la bajaron hasta Araia. Aquí curaron sus heridas con amor y mucha paciencia y le dieron un lugar y un destino nuevo. Ahora es memoria de los hechos”.

La familia no dejó pasar la ocasión sin agradecer “al ayuntamiento de Araia y a la Diputación Foral de Álava por su empeño, esfuerzo y dedicación para con esta escultural”. Concluyó señalando que “Nestor será para siempre parte de este paisaje”.

Tras más de 20 años en paradero desconocido, 'Araba' seguirá manteniendo ese espíritu de libertad en su nueva ubicación E.S.P.

Concurso de relatos

Seguidamente tuvo lugar en el salón de plenos del ayuntamiento la entrega de premios del concurso de relatos que se convocó en primavera para, dar forma literaria a las distintas teorías, conjeturas y elucubraciones fantásticas que, inevitablemente se iban ocurriendo.

Así en categoría adultos castellano el trabajo ganador es el de Vicente Arrizabalaga con el título 'A la sombra del gigante'. En este apartado se presentaron 8 escritos.

Juanma Gallega ha sido el vencedor de la categoría de personas adultas en euskera con su obra 'Zirkuloaren amaiera'.

En el apartado de jóvenes en euskera, en el que se recibieron un total de dos trabajos, el premio ha recaído en Izaro Etxebarria y su 'Mariren orrazie'.

En el concurso también se ha querido premiar a los relatos locales. Así en la categoría de castellano el premio ha ido a parar a manos de Idoia Mendia por su Ladrones de obras de arte, mientras que Gentzane Martín ha conseguido la máxima distinción en euskera por 'Tiriki-trauki'.

“Todas las obras ganadoras pueden leerse a través de la página web del ayuntamiento de Asparrena”, explican desde la organización.

En total ha repartido 900 euros en premios. Así el máximo galardón en categoría juvenil en euskera está dotado con 250 euros y un lote de libros en euskera. En categoría adulto el primer premio en relatos en euskera está dotado con 250 euros y un lote de libros en euskera y el de castellano ha recibidoá 200 euros y un lote de libros en castellano. Además el premio para el mejor relato local de cada categoría ha consistido en un vale de 100 euros en libros (a canjear en las librerías que la organización determine).

22 años después la escultura 'Araba' aparece de nuevo en muy buenas condiciones en las faldas de la cumbre donde estaba instalada. En su restauración se determina que la obra ha estado “protegida” y “cubierta” y no a la intemperie

La historia de 'Araba' y Araia

El tema del concurso ha sido la aparición de la escultura Araba de Néstor Basterretxea. En el año 2000, en el marco de un programa de difusión cultural y cuyo objetivo era que en Araia se configurase el Centro vasco de Arte contemporáneo, el escultor Néstor Basterretxea, a través de una persona de Araia, cede la obra escultórica 'Araba' cuya réplica en bronce se instala en la cumbre del Aratz con el objetivo de que otras esculturas hermanas de ésta lo hicieran en cumbres de los diferentes herrialdes de Euskal Herria.

Poco tiempo después la escultura desaparece de la cumbre. 22 años después la escultura 'Araba' aparece de nuevo en muy buenas condiciones en las faldas de la cumbre donde estaba instalada.

Sin embargo, en su restauración se determina que la obra ha estado “protegida” y “cubierta” y no a la intemperie como podría suponerse. Muchas son las teorías que circulan en Araia de los motivos, los porqués, quiénes, dónde ha estado y por qué hasta ahora.

Tras más de 20 años en paradero desconocido, la obra seguirá manteniendo ese espíritu de libertad en su nueva ubicación

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'Araba, la escultura recuperada de Nestor Basterretxea 22 años después Diario de Noticias de Alava