- Tercero en las apuestas tras Ucrania e Italia, cada vez son más las voces que señalan como más que probable ganador sorpresa de Eurovisión 2022 al británico Sam Ryder y su tema Spaceman, concebida como "homenaje" a Queen, Elton John y todos los "héroes musicales" de su país.
"No siento presión por la victoria, porque no vine buscándola. Vine por mi amor por cantar, igual que empezó todo en TikTok", cuenta este artista al que, después de casi una década probando suerte en todo tipo de bandas y de terminar abriendo un café, la fama le sorprendió a través de esta plataforma cuando menos podía esperárselo.
Cuando más difícil era todo para un músico, durante el primer confinamiento de la pandemia de covid-19, Ryder (Essex, 1989) agarró el móvil y para matar el tiempo se dedicó a subir a la famosa plataforma versiones de temas famosos que grababa en casa. "Durante la pandemia dejé de sobreanalizar mi relación con la música, dejé de verla como un destino, como un videojuego en el que hay que llegar al final, y me dediqué simplemente a cantarle al móvil en una esquina de mi cuarto", rememora tras terminar despertando "sin pretenderlo" el interés de 12 millones de personas y la aprobación de algunos de los intérpretes a los que versionaba, como fue el caso de Justin Bieber.
Así llegó también el contrato discográfico con el sello Parlophone, el mismo de Coldplay, todo un cambio para quien solo unos años antes había decidido abrir un negocio al margen de su pasión para poder ganarse la vida. "Pero nunca pensé dejar la música. Habría seguido haciendo música aunque hubiese sido desde la cama, porque nadie abandona algo que le hace feliz", insiste este compositor e intérprete para el que aquellos años detrás de una barra fueron muy provechosos para su bienestar "físico y mental", enseñándole mucho sobre "lo que es el trabajo duro".
En enero recibió una llamada de la BBC para proponerle cantar en Eurovisión 2022. Habían escuchado su tema Spaceman, una canción "de gran verdad" que había compuesto dejándose llevar "en solo 10 minutos" y que había concebido como un "homenaje" a Queen, a Elton John y a "todos los héroes musicales" de su infancia que dio su país. "Como fan del festival no pude decir 'no'", afirma Ryder, que atesora entre sus primeras memorias del mismo la victoria de los roqueros fineses de Lordi en 2006, justo cuando él acababa de empezar a aprender a tocar la guitarra.
Además de sus agudos de vértigo, las seis cuerdas jugarán precisamente un papel destacado en su actuación en la final del 14 de mayo en Turín. "Lo último que hice en el estudio antes de embarcarme en todo esto fue grabar esa línea de guitarra pensando en el 'crescendo' como el gran momento de mi actuación", destaca. ¿Cómo aborda el gran momento en el escenario de la gran final de Eurovision este próximo sábado? "Durante mis tres minutos en el escenario voy a tomármelo exactamente de la misma manera que lo hice durante la pandemia: cantaré por el placer de cantar. Es la lección que aprendí. Me siento afortunado de ser parte de esto; no lo hago por ningún tipo de validación", insiste este rubio de larga melena y ojos azules.
Se da la circunstancia de que TikTok se ha aliado este año de manera oficial con la estrategia de comunicación del festival, algo que para este "tiktoker" de éxito no debería generar ninguna suspicacia sobre sus posibilidades. "No he tenido ningún tratamiento especial por parte de TikTok. Es una herramienta abierta a todos los artistas y a todos los implicados en Eurovisión los he visto hacer uso de ella. De hecho, es una plataforma muy cuidadosa con que no haya favoritismos y se demuestra en su algoritmo, que se basa en los gustos individuales", subraya, "contento" de que este tema se ponga sobre la mesa. l
"Nunca pensé en dejar la música porque nadie abandona algo que le hace feliz"
Cantante