"¶espazioa nació en un contexto de crisis en dónde los y las artistas locales sufrían un largo periodo de no apoyos públicos, de no visualización. Lamentablemente esa situación ha variado muy poco. Sí, es verdad que ahora tenemos planes estratégicos de cultura tanto en Gasteiz como en Álava, pero las administraciones son incapaces de ser porosas e introducir criterios de participación reales mesas de cogestión elegidas entre todos los agentes culturales o mecanismos de codecisión, al menos para una parte del presupuesto dedicado a cultura". Es una de las reflexiones esenciales que el proyecto de la calle Costa Rica realiza de cara a su séptimo aniversario, que se celebra este lunes.

En este tiempo se han realizado 42 exposiciones. Han participado en ellas más de 300 artistas o personas creadoras (167 mujeres). "Sin duda alguna la pandemia nos sigue afectando pero incluso en los periodos más duros hemos mantenido actividad o hemos salido de nuestro reducido lugar a través de las colaboraciones como la ocurrida con Artium y la representación en su Sala Plaza de a-poesía del No ser un poemario de Yoselín Martín presentado , expuesto y teatralizado". En las muestras llevadas a cabo, el 90% han sido realizadas por artistas locales.

De cara al futuro más inmediato, los actos, debates y exposiciones con temáticas de carácter social se van a mantener "y expandir al campo del arte contemporáneo. En la actualidad estamos organizando una exposición de carácter colectivo que responde a estas preguntas: ¿Qué pasa con la escultura? ¿Ha pasado algo?". Además, se intentará estabilizar la publicación de Gazeta¶espazioa, Gazeta¶espazioase abrirá una nueva convocatoria para tomar parte en el ciclo de exposiciones Kristal¶espazioa, se realizará el primer encuentro y premio de poesía visual de Vitoria, y se buscará el camino para "que se visualice el déficit democrático en cuanto participación real de la cultura en las instituciones". En este sentido, "también estaremos pendientes acerca de la financiación pública, creemos que recortada, y que no llega a quien verdaderamente la necesita porque no tiene representación y no se quiere que la haya". Todo eso sucederá camino a cumplir los ocho años de vida del proyecto "de barrio".