Cómic. El dibujante El Torres ha compartido en Twitter un enlace para ver on line varios de sus cómics de forma gratuita. "Para que podáis echar el rato del aislamiento en casa", ha escrito en su mensaje. Y en la web El Vosque también ofrecen acceso para todos a viñetas y tebeos.
Cien películas gratuitas. En YouTube se han volcado cien películas completas en español para poder ver estos días desde casa. Además, con el carnet de bibliotecas se puede acceder a través de eFilm a un servicio de préstamo de cine similar al de Netflix o HBO (con más de 20.000 películas y alguna que otra serie).
Herramienta de arte, historia y naturaleza. Otra entretenida herramienta para visitar museos de forma virtual es Google Arts and Culture, donde podemos encontrar videos 360º para conocer por dentro el transbordador espacial del Discovery o nadar con el prehistórico dragón marino Rhomaleosaurus, cuyo fósil se exhibe en el Museo de Historia Natural de Londres.
Lectura. El servicio de préstamos de libros electrónicos eBiblio, dependiente del Ministerio de Cultura y Deporte, permite leer en cualquier dispositivo: libros electrónicos, ordenador, tablet, móvil. Se puede acceder y solicitar el préstamo de este servicio si se posee el carnet de socio de alguna biblioteca pública.
o hay lugar abierto adonde ir, y a la vez se puede viajar a cualquier sitio sin salir de casa. El aislamiento es la oportunidad para bajar el ritmo, parar y volver a conectar con una misma. Con los propios gustos y aficiones. Una oportunidad para valorar el tiempo sin horarios impuestos, sin prisas y sin fin específico ni reto de productividad.
Leer, escuchar o interpretar música, pintar con acuarela, contar historias, imaginar, crear con las manos, bailar, ver una buena película, y lo mejor, hacerlo por placer, por propio disfrute y no para contarlo o retratarlo en Instagram. No para decir Yo estuve allí. Ahora estamos aquí, en casa, con nosotros mismos. En pijama y zapatillas. Quizá, más que nunca, en nuestra realidad.
Puede que cueste, al principio, acostumbrados como estamos a vivir casi todo el tiempo hacia afuera, por y para el consumo y la productividad. Habituados al ritmo frenético, a los "tengo que..." y a la cultura-espectáculo. Es momento de recobrar la intimidad, de ejercitar el recogimiento y escucharnos. De disfrutar -quien tenga niños en casa- de la crianza, tan tempranamente externalizada. Leer ese libro para el que nunca teníamos tiempo, escuchar completo ese disco que tanto nos gustaba -y por eso lo compramos-, contar historias a los niños, pintar, inventar juegos y canciones, hacer rimas, atreverse con la poesía, bucear en los libros de arte o entretenerse con un cómic... Las posibilidades son infinitas. No hay excusa. Ahora tenemos lo más valioso: el tiempo.
Como dice la bella reflexión del psicólogo italiano F. Morelli que circula estos días por WhatssApp, "el universo tiene su manera de devolver el equilibrio a las cosas según sus propias leyes, cuando éstas se ven alteradas". Quizá necesitábamos este parón, este respiro forzado, como el Planeta necesitaba con urgencia que la contaminación bajase.
Respiremos, entonces.
Paseo en pijama por el Prado, el Louvre...
El coronavirus agudiza el ingenio en el mundo de la cultura y desde el viernes el streaming se ha convertido en el nuevo "en vivo y en directo".
El Museo Reina Sofía, el Prado y el Thyssen han cerrado sus puertas, pero abren las de sus webs. Los tres principales museos estatales ubicados en Madrid tiene en sus webs un espacio rico en contenidos on line con el que quieren establecer un puente y no perder el contacto con sus visitantes.
El Museo del Prado ha puesto en marcha El Prado contigo, para mantener la conexión con su público. Ampliará el tiempo dedicado a los directos en redes sociales para presentar su colección y comenzará a hacerlo desde las 10 de la mañana.
La web del Thyssen recibe al internauta con un enlace a las visitas virtuales de su colección permanente y la temporal, Rembrandt y el retrato en Ámsterdam, que abrió hace unos días. Todos aquellos que tenían pensado visitar estos días de cuarentena el museo madrileño pueden recorrer todos sus pasillos y ver sus obras detalladamente.
La Casa Encendida de Madrid tampoco apaga su programación y nos propone que la disfrutemos desde el sofá. Y por eso la entidad de Fundación Montemadrid tiene su propia programación #MeQuedoEnCasa. En concreto, desde su portal de Internet se podrá disfrutar de los conciertos que han tenido lugar en las 17 ediciones de La Radio Encendida, de títulos de dibujos animados contemporáneos programados para el ciclo En Familia o de visitas guiadas a las exposiciones. Pero también de sus listas de Spotify con los artistas que han formado -y formarán- parte de la programación en festivales como Electrónica en Abril, She Makes Noise o La Terraza Magnética; o de listas de reproducción vinculadas a exposiciones como la retrospectiva de Gus Van Sant.
Si lo que quiere es viajar desde la cama, el sofá o la alfombra sepa que también se puede dedicar a visitar otros templos del arte como el Museo Peggy Guggenheim de Venecia porque la que era la casa de la mecenas americana con presentaciones virtuales a través de sus redes sociales de sus principales obras.
Y de Italia también podemos disfrutar de manera virtual por la Pinacoteca de Brera, los Museos Vaticanos o la Galería de los Uffizi de Florencia, donde podemos hacer visitas oficiales on line, acceder a su archivo digital o descubrir los detalles más increíbles de sus principales cuadros en alta resolución.
En Francia, el máximo exponente de su arte, el Museo del Louvre, también nos ofrece una conexión on line para conocer no solo sus entrañas, sino también nos dan la oportunidad de conocer a Apolo, la nueva adquisición de esta escultura procedente de Pompeya (Italia) que ha sido posible gracias a la movilización de 5.600 donantes.
A todos estos se suman otros, como el Museo Arqueológico de Atenas, el Museo Británico, el Museo Metropolitano de Nueva York o el Hermitage de San Petersburgo.
Sin salas, pero con oferta abierta al público
No queda un teatro abierto en España, pero eso no significa que no haya oferta en cartel. La plataforma Teatroteca del Centro de Documentación de las Artes Escénicas y de la Música (CDAEM) permite el acceso gratuito desde cualquier ordenador a 1.600 grabaciones de espectáculos completos, también de danza, estrenados en el Estado desde los años 70 hasta hace dos años, lo que da oportunidad a hacer un repaso al género de la Transición a hoy. La página ha registrado ya unas diez mil visitas. Hay también plataformas de pago que funcionan de manera similar a las televisivas, pero este nicho está todavía por explorar en el ámbito de las artes escénicas. En España, de momento, solo hay tres y están todavía arrancando: Allteather.es, Playtheatres.com y My Opera Player.
En cuanto al cine, la amplia oferta online crece todavía más ante estos días de encierro. Cineastas como Jorge Naranjo, Pablo Maqueda y Daniel Castro han subido sus películas (respectivamente, Castings, Manic Pixie Dream Girl -An Internet Love Story-e Ilusión) al portal Vimeo para que cualquiera pueda disfrutarlas. Y los portales tradicionales de pago han amoldado su propuesta al contexto de crisis: Movistar Plus ofrece un mes gratis del canal Movistar+ Lite; y Filmin ha creado el canal Cuarentena, donde sugiere un sinfín de películas.
Sin costes se accede al archivo online de RTVE, mina del cine español y del No-Do. Y, ya fuera de España, se puede bucear en el catálogo gratuito de instituciones como el British Film Institute o la Cineteca de Milán.
La música aporta el Cuarentena Fest, en el que una treintena de artistas españoles independientes actuarán desde su dormitorio, de mañana al 27 de marzo. Ya se han apuntado Cariño, Valdivia, Marcelo Criminal, Estrella Fugaz o Le Nais. El público podrá conectarse a través de los canales de YouTube de los artistas o verlos todos en cuarentenafest.tumblr.com.
Hay donde elegir, incluso con el ordenador y el wifi apagados. ¡Probemos a desenchufarlos!. La cultura es, ante todo y sobre todo en estos días, conexión con una misma.