Vitoria - Aunque estas semanas de vacaciones han supuesto un pequeño paréntesis en la agenda de Oihaneder Euskararen Etxea, es hora de retomar el pulso a las iniciativas culturales. Por eso, la próxima semana volverá a reclamar la atención del público con la realización del certamen Irri-barra gauak, que tomará los días 30 y 31 un Jardín de Falerina que también sigue desarrollando su programación de conciertos Belar Sounds, dentro de la cual mañana a las 13.30 horas acogerá al grupo Lazy Daisy Trío. Todas estas propuestas, como es habitual en el exterior de Montehermoso, serán de entrada gratuita.

En lo que se refiere, en concreto, a Irri-barra gauak, la primera cita con los espectadores se producirá el jueves 30 a las 20.00 horas de la mano de ¡Ay! teatro, que propondrá a los presentes Zaharrak berri (Astolasterrak), interpretada por Nerea Gorriti y Barbara Rivas.

Ganadora del primer premio de Creación de Teatro de Bolsillo 2017/18 de Donostia, según recuerdan desde Oihaneder, en esta obra las dos actrices ofrecen al público una representación “clandestina” de tres piezas satíricas breves, entrelazadas con música y danza, donde la tradición se mezcla con la realidad más actual: los prejuicios sociales, la lucha de la mujer por la igualdad, etcétera. Así, bajo la dirección de Francisco Lidón se tratan “viejos temas que suenan a nuevos”.

Justo 24 horas después y sin moverse del sitio, tomarán el relevo Inazio Tolosa y Ramon Agirre, quienes acudirán a lo alto de la colina con Putinen guardasola, en el que los actores y músicos siguen con el camino recorrido a través de Xentimorik gabe y Kokakola eta Barea, uniendo humor y sonidos casi a partes iguales.

En este caso, presentan una historia que arranca con la supuesta preocupación del lehendakari por la creación de un himno “que nos una a todos los vascos y vascas”. Tras una “larga reunión, han decidido encargarles el trabajo a Ray y Nik”, un proceso que los espectadores presentes en Falerina el viernes vivirán en primera persona.

De esta forma, Oihaneder retomará su agenda cultural, que se despidió el pasado día 7 con el espectáculo de magia que también en su exterior ofreció el gasteiztarra Asier Kidam. Será la manera de ir recuperando el pulso a un curso en el que a buen seguro la música, el cine, la danza y el teatro, así como los encuentros con diferentes creadores volverán a cimentar las propuestas en euskera de un espacio que, además, va a poner en marcha por primera vez la escuela Gazte Sortegiak, un laboratorio para que jóvenes se formen en diferentes disciplinas.