Vitoria - La primera cita es este lunes dentro de la programación de la Seminci, en concreto en la sección Quercus. Justo al día siguiente, habrá que dejar atrás el prestigioso festival de Valladolid para acudir a la sección oficial del Octubre Corto de Arnedo (La Rioja), uno de los certámenes que califican para los Premios Goya. Son los dos pasos iniciales que va a dar Ronda de poniente, un filme documental en el que Kepa Sojo y Sonia Pacios han unido su experiencia audiovisual para firmar a cuatro manos este título.
No en vano, poco hay que descubrir de la larga y galardonada trayectoria del director alavés, pero también hay que subrayar el camino de la responsable de Kuttuna Filmak, más allá de que su labor sea más desconocida de cara al público. De hecho, ella, que aunque reside en el territorio desde hace años es natural de Villaverde de la Abadía, es en buena parte la culpable de que se haya llevado a cabo este proyecto. En concreto, Ronda de poniente está localizado en un pequeño pueblo de la comarca leonesa de El Bierzo, colindante con Galicia: Posada del Bierzo.
La peculiaridad de esta aldea es que es un pueblo-colonia erigido a finales de los años 50 del siglo pasado dentro de la política de regadío que el Gobierno llevó a cabo construyendo pantanos en diferentes puntos. “Las colonias franquistas surgen para acoger en un principio a los habitantes de los pueblos anegados por los pantanos, aunque también fueran a vivir allí personas de las aldeas de alrededor buscando una mejora en sus condiciones de vida, ya que pueblos como Posada contaban con agua corriente, aceras, alumbrado público? y además el Instituto Nacional de Colonización, aparte de proporcionarles vivienda, daba a los colonos un pedazo de tierra y animales para poder vivir dignamente”, explican Sojo y Pacios.
Al modo de Bienvenido, Mister Marshall -un título de referencia para Sojo-, en 1961 la localidad preparó una gran fiesta para recibir al dictador Francisco Franco, quien tenía previsto acudir para inaugurar la aldea de manera oficial. “Los habitantes cuentan la historia de cómo vivieron su llegada a la colonia y la visita de Franco. Los recuerdos son borrosos y las versiones a veces no coinciden, pero es historia oral y memoria histórica de un acontecimiento que se repitió en muchos otros lugares de España durante la dictadura”, apuntan los realizadores.
También desde la localidad natal de Pacios, que está a dos kilómetros de Posada del Bierzo, se trasladó gente a vivir y a ver al dictador, unas vivencias que están en el origen de este proyecto documental. Sojo recuerda que la primera vez que acudió a la aldea se sorprendió por lo extraño de la fisonomía del lugar, más parecida a un pueblo andaluz. Estas y otras cuestiones se tratan en este corto llevado a cabo con ayudas del ICAA (Ministerio de Cultura), Diputación de León, Ayuntamiento de Carracedelo y Universidad de Zaragoza, además de la Junta de Castilla y León.