san josé - La película dramática Medea, de la cineasta costarricense Alexandra Latishev y que se exhibirá en el Festival de Donostia, desafía el típico rol femenino que ha sido construido por la sociedad para mostrar a una mujer distinta.

Este filme, que competirá en la categoría Horizontes Latinos del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, retrata a una joven que se siente ajena a su cuerpo y desconectada de su entorno.

La directora Latishev dice que Medea cuenta la historia de María José, interpretada por Liliana Biamonte, una chica universitaria a principios de sus veinte que carga con el secreto de su embarazo no deseado. Sus días transcurren entre sus estudios, sus distantes padres, los entrenamientos de rugby y las aventuras con su mejor amigo. En ella se visibiliza la condición de la mujer con una mirada que se aleja de los estereotipos. “Tiene que ver con una condición de género, tiene que ver con ser mujer y que de alguna manera no somos completamente dueñas de nuestros cuerpos, porque muchas de nuestras decisiones están demasiado condicionadas por otros”, afirma la directora.

Latishev añade que su interés se enfocó en trabajar el tema del cuerpo, al que cataloga como “un espacio político” que además tiene que vivir en un contexto “completamente opresivo”, en donde la toma de decisiones siempre va a estar condicionada por los demás. María José oculta su embarazo, lo tiene en negación y lleva eso hasta las últimas consecuencias, en el contexto de un país en el que el aborto está penalizado mientras no represente un peligro para la vida o la salud de la madre. “La película esta formada por una serie de situaciones que podrían corresponder a la cotidianeidad de nosotras como mujeres, pero la idea es exponer el alrededor, un país que no reconoce lo que tiene al frente, en donde no tenemos una relación igualitaria, y además somos completamente ajenos al dolor y sufrimiento del otro”, destaca la cineasta. Según Latishev, la negación no solamente se centra en la joven, sino también que se vive a nivel colectivo, en el que su entorno cercano no nota, ni ve, ni se interesa en sus cambios.

La película tuvo su estreno mundial en el Festival de Cine BAFICI en Buenos Aires, el pasado abril. - María José Brenes