Vitoria - Aunque no estaba en la agenda, Aitor Sáez de Cortázar -en esta ocasión en su papel de director de Gasteizko Abesbatza, marca que usan de manera conjunta los coros Araba y Samaniego cuando colaboran- no quiso desaprovechar ayer la presentación del concierto de este lunes de la Orquesta Sinfónica de Euskadi para hablar del “único lunar” de este proyecto: “el Teatro Principal está limitado para acoger conciertos de esta magnitud. Álava se merece un sitio mejor”.
En este sentido, y con un análisis compartido con Sabin Salaberri (que no quiso evitar la cuestión aunque en su momento “me llovieron muchas críticas”), ambos defendieron que el escenario de la calle San Prudencio tiene dos problemas principales de difícil solución, por no decir imposible. El primero, su acústica, que no está preparada, a su juicio, para este tipo de programas. El segundo, sus dimensiones, que obligan, en este caso por ejemplo, a recortar el número de coralistas participantes ante la imposibilidad física de contar con más, una situación no tan extraña para la propia Orquesta Sinfónica de Euskadi.
Cabe recordar que en la pasada temporada de abono de la OSE, ésta no pudo traer a Gasteiz su colaboración con el Malandain Ballet Biarritz ante la imposibilidad de poder llevar a cabo el montaje La Bella y la Bestia en el Principal, algo que sí se pudo hacer con toda normalidad en las otras tres sedes de la agrupación vasca: el Euskalduna bilbaíno, el Kursaal donostiarra y el Baluarte pamplonés.
Preguntado por la idoneidad o no del teatro vitoriano para la actividad de la orquesta, su director general, Oriol Roch, con toda la diplomacia de la que fue capaz, aseguró que el Principal es “el menos adecuado” de los cuatro espacios, aunque remarcó que, como viene haciendo desde su fundación, la OSE tiene “vocación de estar aquí” y de adaptarse a las circunstancias que se den en cada una de las ciudades. Con todo, es verdad que su antecesor en el cargo, Iñigo Alberdi, se mostró -cuando el proyecto de la plaza Euskaltzaindia parecía encaminado- deseoso de que Vitoria contase con un auditorio. De hecho, tanto en este caso como con la propuesta del Paseo de la Música, la orquesta fue consultada por el Ayuntamiento de Gasteiz.
“Tenemos que reclamar un auditorio y tenemos que conseguir que este tema vuelva a estar en la agenda política”, insistió Sáez de Cortázar. “El Principal tiene una deficiencia de capacidad y otra de eficacia”, remarcó Salaberri. - C.G.