Madrid - Miguel Falomir afirmó ayer en su toma de posesión de su cargo como director del Museo del Prado en sustitución de Miguel Zugaza que no tiene ninguna intención de reclamar el Guernica de Picasso al Reina Sofía.

El acto tuvo lugar en el Claustro de los Jerónimos y a él acudieron diversos representantes políticos, además del Ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo. Tras el juramento de su cargo -acompañado con una larga ovación de los presentes-, Falomir tomó la palabra para agradecer tanto al Real Patronato como a Zugaza su elección, sin olvidarse del resto de la plantilla de trabajadores del museo. “Muchos de ellos podrían ocupar mi lugar con igual merecimiento”, apuntó. El nuevo director recordó que, pese a que Zugaza “ha sido el mejor director en casi dos siglos” del Prado, no todos sus proyectos han podido ser terminados y deberán “consolidarse”. De cara a los retos, señaló tanto la ampliación del Salón de Reinos -que Méndez de Vigo volvió a situar en 2019- como la celebración del bicentenario de la pinacoteca. No obstante, también insistió en la idea de abrir el museo “en una fecunda interacción” con la sociedad, ya que la pinacoteca “no puede ser una urna de cristal por muchos brillantes que la adornen”. Asimismo, pidió el “concurso de todos” los actores para “lograr sólidos cimientos de cara al Prado del futuro”.

Falomir aseguró, asimismo, que “nunca” bajo su dirección se solicitará la vuelta del cuadro Guernica, de Picasso, actualmente en el Museo Reina Sofía, a diferencia de lo que ocurrió bajo el mandato de su predecesor, Miguel Zugaza. “Creo que está magníficamente bien en el Reina Sofía y soy el primero que está deseando ver la exposición que se va a hacer allí con motivo del 80 aniversario”, dijo. Y lamentó que “a veces se olvide” que tanto el Reina Sofía como el Prado son museos nacionales y que, por lo tanto, “lo importante” es que el cuadro esté en un museo español. “El Guernica es una obra magnífica y a cualquier director de museo le gustaría tenerlo, pero ese no es el caso aquí. Desde luego, mientras yo sea director ni se va a pedir el cuadro ni se va a entrar en competencia”, zanjó.

Tras aprobar el Patronato por unanimidad su candidatura, el director afirmó afrontar este reto “con responsabilidad, pero sin miedo”, a pesar de reconocer que en un primer momento rechazó el ofrecimiento de dejar su puesto de director adjunto. “Mis mayores objeciones en ese momento eran de tipo profesional, pensaba que tenía que dejar a un lado mi carrera como historiador del arte para pasar a la gestión”, señaló.

paso a la reserva Por su parte, Zugaza -también muy aplaudido en su intervención- aseguró que este cargo supone “una enorme responsabilidad” que no deberá ser “soportada por una sola persona”. Así, celebró tanto el respaldo del actual Gobierno y los anteriores desde el año 1995, como la necesidad de “un trabajo armónico” entre el Real Patronato y la dirección de la institución. “Todos estos apoyos son necesarios para que el más extraordinario de los equipos trabaje en libertad e independencia”, incidió. Zugaza elogió la figura de Falomir, alguien “muy diferente” a él, pero que a la vez “es quien mejor encarna la ambición actual y continuidad” del proyecto. - E.P.