kendall Jenner ha recibido la peor de las noticias. Un juzgado de Los Ángeles ha decidido estos días poner en libertad a Shavaughn McKenzie, un joven de 25 años que se coló en su casa. La juez encargada del caso ha determinado que el acusado tiene problemas mentales y, tras haber pasado tres meses en la cárcel, lo conveniente es que vuelva a Virginia para estar al cuidado de su madre.
Pero la modelo no es la única que ha sufrido acoso. Son muchos los que han visto de cerca el lado oscuro de la fama. Es el caso de la cantante Taylor Swift. Su acosador se presentó en su casa dispuesto a casarse con ella y se derrumbó al conocer que en ese momento se encontraba saliendo con el actor Tom Hiddleston.
A Madonna también le pidieron matrimonio de una manera especial. En 1995, un hombre llamado Robert Dewey Hoskins, de 43 años, entró en la casa de la artista pero no se encontró con ella, sino con su manager, quien rápidamente pidió ayuda. Dewey aseguró que “rebanaría la garganta de Madonna de oreja a oreja” si no se casaba con él esa misma tarde. Su amiga Britney Spears también sufrió el acoso de un fan. Se trataba del japonés Masahiko Shizawa, quien le envío una fotografía que decía “te estoy persiguiendo”. Un hecho límite ante el que la cantante solicitó una orden de alejamiento.
Más grave fue el caso de Catherine Zeta Jones. En el año 2002 la actriz empezó a recibir cartas llenas de amenazas por parte de Dawnette Knight, una mujer que se había encaprichado de Michael Douglas, su marido. Knighe envío cartas al actor, llegando a escribir “la cortaremos en lonchas finas y se la daremos de comer a los perros”. El acoso que duró medio año y acabó con una condena de tres años de prisión para Dawnette, pese a que pidió perdón en infinidad de ocasiones alegando estar encaprichada de Michael Douglas.
Han pasado dos años desde que Sandra Bullock se enfrentó a uno de los peores episodios de su vida. La actriz estaba en su casa de Los Ángeles cuando escuchó un ruido y se asustó. “Pensé que era una corriente de aire, pero entonces he visto a un hombre”, decía en conversación con los agentes de seguridad. Y como si de un thriller se tratase, la actriz se encerró en el armario de su habitación y logró llamar a la policía. “Estoy escondida en el armario, tengo una puerta de seguridad”, les dijo entre llantos. Fue esta conversación la que permitió que los agentes llegasen al lugar donde estaba ella y detuviesen a su acosador. Joshua Corbett entró a casa de la actriz con una metralleta en la mano, una carta y varias revistas con ella en portada.
brad pitt En el caso del actor y director estadounidense, la obsesión también se convirtió en un allanamiento. A finales de los años noventa, la joven Athena Rolando se coló en su casa a través de una ventana. Por suerte, el actor estaba rodando en Europa.
La joven relató que oía voces que le decían que fuese hasta casa del actor. Tras pasear por los alrededor de su casa en Los Ángeles, encontró una ventana abierta y entró. Estuvo recorriendo la casa durante diez horas hasta que finalmente hizo sonar una de las armas. El personal de la casa y dos policías la encontraron durmiendo en la habitación de Brad Pitt y vestida con ropa que había sacado de los armarios. Además, llevaba un libro sobre brujería, una muñeca con agujas y una carta para el actor en la que le pedía perdón por haberle echado un maleficio hace tres años.