Vitoria - Tras su primera visita en 2014, la Dutch National Ballet Junior Company regresa hoy al escenario del Principal. En este caso lo hace en el marco de la cuadragésimo primera edición del Festival Internacional de Teatro de Gasteiz, un certamen que este año está contando con una importante presencia de la danza, aunque hasta ahora los espectáculos en este sentido se han centrado en el público familiar. La agrupación, puesta en marcha hace un lustro con la intención de ser el trampolín definitivo para sus jóvenes componentes, se encontrará con los espectadores a partir de las 20.30 horas, quedando todavía entradas disponibles por 24 y 16 euros.
Una docena de intérpretes de entre 17 y 21 años se subirán a las tablas de la calle San Prudencio para ofrecer un “repertorio variado” con el que acercarse también “a ese público joven que también es muy importante para nosotros y para el ballet en general”, explicaron ayer Ernst Meisner, coordinador artístico de la compañía, y Marijn Rademaker, bailarín principal de la Dutch National Ballet que pone su experiencia al servicio de este grupo junior. “Son chicos y chicas que empiezan a trabajar a las 10 de la mañana y que no paran hasta las seis. Nosotros estamos en la misma sede y solemos pasar para trabajar juntos, algo que es muy bonito y también interesante para nosotros”, apuntó.
Con esta apuesta por la cantera, el ballet holandés no trata tanto de enseñar a jóvenes que llevan desde muy pequeños formándose, sino “ayudarles a ganar experiencia frente al público. Cada vez que tienen una actuación es una oportunidad para ellos y ellas”, según Meisner, quien comentó que ese esfuerzo también se refuerza al contar con la colaboración de coreógrafos invitados de prestigio.
Al mismo tiempo, ambos subrayaron que el proyecto de la Dutch National Ballet Junior Company no se queda solo en el apoyo a los intérpretes, sino también en la labor con jóvenes músicos, técnicos, diseñadores y también coreógrafos. “Son las estrellas del futuro” aunque con un presente a la altura de las expectativas del público. Así lo demuestran cada año con las actuaciones que realizan dentro y fuera de Holanda. - DNA