BILBAO - “Hemos aprendido unas reglas, unos modos; solo hay que ponerlos en práctica, cada uno verá cómo y dónde. Yo no puedo dejar de hacerlo, cada vez veo cosas diferentes y llevo muchos días jugando a este juego”. Podrían ser las palabras de un niño fascinado por un descubrimiento: el arte. Pero no. Se trata de Jorge Rubio, artista que se ha involucrado este año en el proyecto Aprendiendo a través del arte que promueve el Museo Guggenheim Bilbao desde 1998.

El objetivo de la iniciativa, en la que participan menores de toda la CAV, es descubrir nuevos horizontes y desarrollar las capacidades artísticas de los escolares a través del juego. “Aquí no pierde nadie”, asegura el propio Rubio, “ni siquiera aquel al que no le interesa el juego, porque, mientras los otros juegan, mira la partida y al poco la corrige, y, más tarde, ya entiende el juego. Hasta que queda un hueco y pide cartas para jugar”.

Otra de las artistas que conduce el proyecto, Naia del Castillo, va más allá, y desgrana todas las bondades de Aprendiendo a través del arte: “Los escolares no solo adquieren conocimientos sobre un tema curricular, sino que aprenden a utilizar nuevas herramientas y materiales, a ser perseverantes con una idea, a explorar su visión personal, a evaluar, a asumir riesgos, a observar sus errores, a trabajar en grupo, a valorar sus opiniones y a relacionarse con el arte contemporáneo”. Es decir, aprenden a explorar la capacidad estética y comunicativa del arte.

En total, durante el curso 2014-15 se han implicado 143 escolares de entre 6 y 12 años, pertenecientes a los centros educativos de Arrateko Andramari (Eibar), Birjinetxe (Bilbao), Kueto (Sestao), Lamuza (Laudio), Otxarkoaga (Bilbao), Ramiro de Maeztu (Oion). A su lado han estado en todo momento Elssie Ansareo, Naia del Castillo, Iñaki Gracenea, Maider López, Ainhoa Ortells y Jorge Rubio, artistas que han hecho el trabajo de lazarillos, tratando de guiar a los escolares por los misterios de las distintas disciplinas artísticas: fotografía, pintura, escultura...

Los niños disfrutan, los artistas enseñan y aprenden a la vez y los profesores siguen entusiasmados todo el proceso. Como Iñigo Beristain, del centro alavés Ramiro de Maeztu: “La experiencia ha sido muy positiva. En nuestro caso, ha supuesto que escolares de diferentes modelos lingüísticos convivan y trabajen juntos para llevar a buen puerto el proyecto final. En este programa se resume bien lo que, en mi opinión, debería ser la Escuela: un lugar lleno de retos y experiencias divertidas e interesantes que contribuyan a la cohesión social y a la formación de personas con inquietudes, más iguales, más libres y más críticas”.

El museo bilbaíno muestra los trabajos de los seis grupos, que podrán verse hasta el 20 de septiembre. Además, las audioguías contendrán, por primera vez, información general sobre este programa y la explicación de algunos de los trabajos incluidos en Aprendiendo a través del arte, como sucede en el resto de las exposiciones. En las dos salas habilitadas para ello, los visitantes podrán ver composiciones realizadas en torno a la comida, a los animales vivíparos y ovíparos, fotografías y retratos muy personales, además de murales donde se puede ver el mismo paisaje durante distintas estaciones del año.

intercambio Desde 1999, Aprendiendo a través del arte ha facilitado a escolares, artistas y profesores participantes la posibilidad de desarrollar un intercambio cultural a través de la educación artística entre colegios de Educación Primaria de la CAV y de Nueva York.

Según indican los responsables del Guggenheim Bilbao, en este curso, una clase del colegio Kueto de Sestao y otra del PS 88 del barrio de Queens en Nueva York se cartearon e intercambiaron fotografías e información sobre sus respectivos entornos y sobre sus proyectos artísticos. Así, acompañados de la artista Joanna Warren, “los escolares norteamericanos aprendieron a pintar sus lugares favoritos con acrílico y acuarela. Los vizcaínos realizaron sus trabajos con tabletas digitales y, con la ayuda del artista Jorge Rubio, elaboraron guías visuales de su entorno cercano que pudieron mostrar a sus compañeros de Queens”.

Partaidetza. 1998tik, 2.639 ikaslek, 28 artistak, Lehen Mailako Hezkuntzako hiru hizkuntza-ereduen 186 irakaslek eta EAE osoko 127 ikastetxek saiamenez lagundu diete Guggenheim Bilbao Museoko hezitzaileei ‘Artea ikasbide programa’ gauzatzen.

Xedea. Egitasmoaren helburua da eskola-curriculuma indartzea edozein ikasgairi heltzen dioten artejardueren bidez. Era berean, ikasleei irakasten zaie munduari era sortzaile eta pertsonal batean begiratzen, baita hainbat gaitasun lantzen ere, adibidez, idazkuntza eta ahozko adierazpena. Gainera, balioak eskuratzen dituzte: talde-lana, beste kulturekiko bizikidetza edo ingurumenaren errespetua.